Miembros del cuerpo técnico y jugadores del Blusens Networks Universidade de Vigo posan juntos, sonrientes, tras el protocolario homenaje mutuo entre rivales a la conclusión del encuentro. A todos se les nota el alivio. Eran ya muchas jornadas sin ganar y las honduras de la clasificación empezaban a resultar agobiantes. El entrenador, Norm Maxwell, está contento con el rendimiento de sus jugadores y espera que sea el inicio de una fase más productiva de la temporada.

"Es verdad que es una victoria que necesitábamos", reconoce el neozelandés. "Fuimos un mejor equipo hoy, con buena estructura. Nuestro rival trabajó duro, son fuertes en delantera, pero me parece que fuimos mejores que ellos". Siempre atento al componente espiritual del rugby, Maxwell destaca: "Es bueno ganar para liberar las emociones. Los chicos realmente querían ganar hoy y se lo merecieron".

Con problemas de efectivos, especialmente para organizar entrenamientos de buen nivel competitivo, Maxwell resume su receta: "Es cuestión de permanecer juntos. Llevamos dos años duros. Necesitamos tiempo para recuperar la confianza. Poco a poco". Y destaca el compromiso de gente como Muñiz: "Estoy muy contento por todo el esfuerzo que los chicos ponen".