Santi Mina, el goleador más joven de la historia del Celta en Primera División, vuelve a Balaídos tras protagonizar la gran venta del último verano. Su fichaje relámpago por el Valencia, que pagó íntegra la cláusula de rescisión del canterano, reportó a las arcas del club 10 millones de euros -el tercer traspaso más caro de la historia celeste después de las ventas de Míchel Salgado y Claude Makelele al Real Madrid- que han servido para financiar los fichajes de Iago Aspas, Daniel Wass, John Guidetti y Dejan Drazic y comprar al Benfica el 30 por ciento del pase de Nolito que seguía en posesión del Benfica.
Mina vuelve a casa tras tener cierto protagonismo en el arranque liguero del Valencia, con el que ha jugado seis de los nueve encuentros disputados por el cuadro de Mestalla en la Liga (367 minutos), además de dos partidos de la fase previa de la Liga de Campeones, un tiempo más que considerable para un futbolista de su edad teniendo en cuenta el nivel presupuestario de la plantilla valencianista, el irregular inicio de curso del conjunto de Nuno y la alta exigencia de la afición che, proclive como pocas a silbar a los suyos. Sus amigos y técnicos próximos a él, como su descubridor, Toni Otero, o Paco Herrera, el entrenador que le dio la alternativa en Primera División con solo 17 años, le auguran un gran futuro en Mestalla y consideran su fichaje "todo un acierto".
El defensa central del Celta B David Goldar, amigo íntimo de Mina, cree que la experiencia de salir de Vigo le ha ayudado a crecer tanto en el ámbito personal como en el profesional. "Lo veo bien, madurando como persona. Allí hace cosas que aquí no hacía, como llevar una vida más independiente y organizarse un poco la vida. Independizarse te sirve para madurar como persona y también se transmite al campo. Obviamente tiene morriña pero lo veo muy bien", explica Goldar, que considera la apuesta de firmar por el Valencia todo un desafío para su amigo.
"Él sabía que no le iba a resultar fácil. Ir al Valencia era un reto complicado pero lo aceptó y creo que ha dado un paso adelante. Está teniendo minutos importantes para ayudar a lo largo de la temporada y seguir creciendo. Tiene mucho aún por mejorar pero él lo sabe y el míster cuenta con él", apunta Goldar, que precisa: "Por lo que me cuenta, la del Valencia es una afición muy exigente, que siempre está expectante. Pero él tiene que aprender a convivir con esa presión y así tiene que ser. Obviamente tiene gente dentro del vestuario de la que aprender y en quien fijarse. Creo que lo está llevando muy bien y seguro que las cosas van a ir a mejor con el paso del tiempo".
Toni Otero, director deportivo del CD Lugo, opina que Mina ha dado, con su fichaje por el Valencia, un paso hacia la madurez. "Es un chico que ya apuntaba a que iba a pasar esto. Tomó la decisión de avanzar en el mundo del fútbol y es una etapa más en la que tiene que avanzar, esta vez fuera de su casa y en un club en el que hay muchísima presión", expone el excoordinador de las categorías inferiores del Celta, que subraya la gran capacidad del artillero para sobreponerse a la presión ambiental. "Para crecer, un jugador tiene que salir de su zona de confort. Él estaba feliz en Vigo y la afición lo quería mucho pero fue él el que tomó la decisión de intentar crecer. Lógicamente la responsabilidad y la presión van a hacer que madure y mejorará como jugador", apunta Otero, que remacha: "Lo que pasa es que es un chico muy joven, que aún no ha cumplido 20 años. Estamos hablando de un chico de 19 años que está jugando Liga de Campeones y madurando en su proyección deportiva".
Aunque Nuno le utiliza en el Valencia en una posición distinta a la que Mina ocupaba en el Celta con Luis Enrique y con Berizzo, el exresponsable de la cantera céltica está convencido de que rendirá bien en cualquier posición que le pongan. "Es un delantero moderno, muy fuerte, que puede jugar en cualquiera de los dos costados o en punta. Tiene llegada y potencia y se va a adaptar a la posición en que lo pongan. A mí donde más me gusta es en la izquierda pero tiene capacidad para jugar donde quiera por su fuerza y versatilidad, su manejo de las dos piernas y su modo de proteger el balón. Es un futbolista muy completo. El Valencia ha hecho un gran fichaje", concluye.
Paco Herrera, mientras, sostiene que no solo el Valencia ha hecho un buen negocio. "Cuando sacas un jugador joven y va hacia arriba yo siempre creo que es un acierto vender", afirma el ex técnico celeste. Y precisa: "Creo que ha sido un acierto tanto del Celta, que promociona a un jugador joven, como del Valencia, que se lleva a un delantero muy prometedor".
El mentor de Mina opina sin embargo que el futbolista se ha arriesgado fichando por un club tan propenso a la convulsión como el Valencia. "Un club que es convulso y que hay problemas de diferentes tipos igual no es el mejor destino para un chico de 19 años, pero eso depende de él", apunta Herrera, que cree preferible que Mina jugase en este momento en una sola posición. "Para mi es un jugador con características de arriba pero creo que ahora mismo hay que dejarle crecer en un mismo sitio, si no seguramente perderá referencias", advierte.
