A falta aún de la disputa de cuatro grandes premios para la conclusión de la temporada -los de Estados Unidos, México, Brasil y Abu Dabi-, el británico Lewis Hamilton tiene este domingo en el circuito de Austin (Texas) la primera oportunidad de lograr la que sería su tercera corona mundial y segunda consecutiva a los mandos de un Mercedes. Hamilton aventaja en estos momentos en 66 puntos a Sebastian Vettel y en 73 a Nico Rosberg, con lo que lograría el título sumando en Austín nueve puntos más que el piloto de Ferrari y dos puntos más que su compañero en Mercedes.
Una combinación ganadora para Hamilton sería lograr la victoria por delante de Rosberg, pudiendo con ello olvidarse de pensar en Vettel. El "doblete" Hamilton-Rosberg ha sido el resultado más repetido este año en el podio, pues en seis de las nueve victorias que logró el británico esta tempora lo hizo justo por delante de su compañero de equipo.
Para Hamilton, en cualquier caso, es la primera oportunidad de igualar los tres títulos de Senna, Piquet, Lauda, Stewart y Brabham, mientras que para Vettel todo pasa por acabar por delante del campeón del pasado año para poder alargar la emoción del campeonato. Y el Ferrari del alemán sólo ha estado este año en cuatro ocasiones por delante del Mercedes del inglés: en los Grandes Premios de Malasia, Hungría y Singapur, en los que Vettel lograba la victoria, y en el de Mónaco, cuando era segundo tras Rosberg y Hamilton finalizaba tercero.
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Con nueve victorias en las quince carreras ya disputadas esta temporada, Lewis Hamilton está aún en disposición de alcanzar el récord de las trece logradas por Sebastian Vettel en 2013 (también en diecinueve citas) y las de Michael Schumacher en 2004, aunque éste las consiguió en sólo dieciocho pruebas.
Otro récord al alcance del británico es el de podios en una temporada, pues lleva trece (nueve victorias, tres segundos puestos y un tercero) y podría alcanzar los diecisiete de Vettel en 2011, también con diecinueve carreras en el calendario, y las de Michael Schumacher en 2002, cuando el "kaiser" acabó en el cajón en todas las citas disputadas aquel año.
Si lo sucedido el pasado año en Austin cuenta para algo, también lo hace a favor de Hamilton, que en 2015 ganaba en Austin por delante de Rosberg y del Red Bull del australiano Ricciardo.
