El Celta Baloncesto cedió la primera derrota de la temporada en un partido en donde las viguesas tuvieron muchos problemas con el rebote, que resultó determinante en el desenlace final del encuentro. Los dieciocho rebotes ofensivos del cuadro leonés mermaron las opciones viguesas durante el encuentro.

León quiso ganar el partido de ayer desde la defensa, y por eso salió en zona desde el salto inicial. El equipo de Cristina Cantero no era capaz de jugar con velocidad y en estático no estaban demasiado afortunadas en el tiro. León se puso por delante en el marcador, pero también tenía muchos problemas en ataque, ya que las viguesas conseguían defender bien a pesar de comenzar los problemas con el rebote. Fueron unos primeros diez minutos jugados a impulsos, y esa circunstancia benefició a las viguesas, que consiguieron meterse en el partido y llegar al final de los primeros diez minutos de juego con tan solo tres puntos de desventaja.

En la segunda parte la decoración no cambió demasiado. León seguía en zona y las viguesas seguían teniendo problemas para ver aro con facilidad, aunque el trabajo defensivo les permitía que las leonesas no se fueran en el marcador con más de siete puntos de ventaja.

La entrada el pista de Paloma González fue un revulsivo para el conjunto vigués. La base le imprimió al equipo un grado más de velocidad que el juego agradeció y las diferencias se fueron reduciendo de forma paulatina. Además, a dos minutos y medio para el descanso, Sarah Ogoke entraba en cancha. La senegalesa había llegado a Navia quince minutos antes de iniciarse el encuentro, con el tiempo justo de cambiarse y asistir a la charla inicial de Cantero instantes antes de comenzar el encuentro.

En sus primeros instantes sobre la pista Ogoke le dio a Loureiro dos asistencias que la viguesa aprovechó para dejar la diferencia en dos puntos al llegar al descanso, 24-26.

La salida de las viguesas tras el descanso fue brutal, logrando un parcial de 7-0 y poniéndose por delante en el marcador. Sin embargo León no se quedó atrás y en cuatro minutos siguientes logró un parcial de 0-11 que apuntaba como decisivo para el desenlace final.

En los últimos diez minutos del encuentro, el equipo vigués volvió a tener problemas en ataque. Además, el cansancio hacía su primera aparición y a cinco minutos para la conclusión del encuentro las leonesas ganaban por diez puntos de ventaja. Todo parecía visto para sentencia, pero una vez más el cuadro vigués tiró de casta aprovechando cierta relajación de las leonesas y a quince segundos para el final lograron ponerse a un punto en el marcador, 53-54. Además, el balón era para el Celta Baloncesto, que preparó la última jugada del encuentro. Una jugada que finalizó Laura Alonso con un lanzamiento precipitado antes de tiempo que dejó el partido visto para sentencia.