Los problemas físicos con los que abandonaron Gustavo Cabral y Pablo Hernández el partido de Sevilla no les impedirán a ambos futbolistas estar a disposición de Eduardo Berizzo para el duelo que el Celta afrontará mañana en Balaídos ante el Barcelona (20.00 horas), correspondiente a la quinta jornada de la Liga BBVA y en el que estará en juego el liderato. Más complicada parece la presencia de Jonny Castro en esta cita contra el vigente campeón de Liga y de Europa, debido a que el lateral fue expulsado en el Sánchez Pizjuán tras recibir dos tarjetas amarillas. No obstante, los servicios jurídicos del club han preparado una alegación ante el Comité de Competición por la segunda de las cartulinas, en un intento de evitar que sancionen al canterano con un partido de suspensión. Si no prosperase la reclamación, Jonny se perdería uno de los partidos del año que más ilusiona a los jugadores y a la afición del conjunto celeste.
Cabral y Hernández ni siquiera entraron en el parte de la enfermería tras retirarse con molestias del Sánchez Pizjuán. El central fue sustituido en el minuto 58 por Fontás con una contractura en un gemelo. Cinco minutos después, el chileno-argentino se marchó al vestuario con un esguince leve de rodilla. En esos momentos, el duelo exigía mucho trabajo a los célticos para impedir que el Sevilla igualase el marcador y el esfuerzo pasó factura a Cabral y a Hernández.
Sin embargo, sus problemas físicos se quedaron en un susto. El equipo regresó en vuelo chárter a Vigo en la tarde del domingo y ayer por la mañana volvió a los entrenamientos en A Madroa.
Suave entrenamiento
Los que jugaron en la capital andaluza realizaron una suave sesión de trabajo. En la misma participaron el central y el centrocampista sin resentirse de las molestias, por lo que el club ni siquiera los incluyó en el parte de bajas y se espera que hoy entren en la lista de convocados que Berizzo anunciará tras el entrenamiento que el conjunto celeste celebrará esta mañana a puerta cerrada en la ciudad deportiva situada en Candeán.
Los problemas físicos de Cabral en el Sánchez Pizjuán obligaron a Berizzo a recurrir a Andreu Fontás, a quien el técnico había reservado en el banquillo después de que se recuperase de una tendinitis que apenas le permitió entrenar durante la semana. El defensa catalán jugó la última media hora de partido y colaboró en el triunfo de los célticos en el campo del ganador de la Liga Europa en las dos últimas ediciones.
Después del susto inicial, Berizzo no tendrá que recurrir obligatoriamente al filial para confeccionar la lista de dieciocho jugadores que mañana estarán citados para el partido contra el Barça. Sin embargo, es probable que el técnico argentino intente repartir los esfuerzos de los tres centrales específicos con que cuenta en la plantilla. Aunque la pareja titular en el arranque de la competición ha sido la formada por Cabral y por Fontás, es probable que Sergi Gómez repita en el once tras estrenar este curso la titularidad en Sevilla.
El zaguero barcelonés realizó un notable trabajo contra el conjunto de Emery, que recurrió a la envergadura de Fernando Llorente para solucionar la desventaja de dos goles con la que su equipo inició la segunda parte. El delantero riojano marcó a los nueve minutos de entrar en el campo.A partir de ahí, la zaga celeste ya no le permitió ningún remate franco.
El lateral izquierdo
La otra preocupación del Celta es la sanción de un partido que tendrá que cumplir Jonny por las dos amarillas que le mostró Jaime Latre. El club preparó ayer una alegación con imágenes de la jugada en la que el colegiado señaló falta del lateral céltico sobre Krychowiak, que exageró la caída tras un leve contacto. Jonny vio la segunda amarilla.
El Comité de Competición se reúne mañana por la mañana. Si no prospera la alegación, el club quizás presente una reclamación ante el Comité de Apelación. En caso contrario, Jonny se perdería el duelo ante el Barcelona y su baja la cubriría Carles Planas, que jugó los minutos finales ante el Levante y el Rayo.
