Luis Enrique Martínez, técnico del Celta, declaró ayer que su equipo se propone sellar hoy matemáticamente la permanencia en Primera División derrotando al Valladolid y añadió que espera celebrar con la afición celeste la consecución de un complicado objetivo por que el Celta lleva batallando muchos meses. "Es importante que la afición sepa que este partido supone por fin conquistar tan ansiado honor, por llamarlo de alguna manera, por el que llevamos luchando desde el último partido de la temporada pasada.", indicó el técnico asturiano en rueda de prensa tras el último entrenamiento celebrado en A Madroa. "El objetivo de esta temporada era conseguir la salvación por méritos propios, sin depender de los demás y lo antes posible. Ese día ha llegado y contamos con el apoyo de nuestra afición para conseguirlo", agregó.

Luis Enrique prevé sin embargo no pocas dificultades ante "un rival muy necesitado, difícil y bien trabajado, que tiene una imperiosa necesidad de sumar puntos" y que comparece en Balaídos frente a un Celta al que le une "una ilusión y unas ganas de seguir refrendando que nuestro trabajo a lo largo del año ha sido bueno y queremos hacerlo en casa en este próximo partido y darlo todo".

El preparador celeste está convencido de que el Valladolid "nos va a presentar dificultades y problemas" y por eso espera que su equipo "sea superior desde el inicio y merezca la victoria".

A pesar de que el Celta tiene prácticamente conseguido su objetivo y es muy difícil que con tres partidos más por delante se le escape la permanencia, Luis Enrique no teme que sus jugadores se relajen esta noche. "Al revés. Esa preocupación podría haber existido si quedasen tres o cuatro partidos para llegar a nuestro objetivo pero ya estamos en la recta final, quedan tres o cuatro zancadas para llegar a la meta", apuntó. Y añadió: "En estos casos es más difícil controlar el exceso de euforia y las ganas de hacerlo bien. Después de la victoria de Almería, el equipo ha demostrado que está preparado para competir, lo va a hacer a lo largo de las jornadas que quedan, pero es significativo tener la oportunidad de cerrar al permanencia con nuestra afición".

El preparador celeste espera, en este sentido, esta noche un encuentro diferente al de la primera vuelta. "Fue un partido en el que nos expulsaron un jugador a Charles, pero ahora tenemos la intención de solventarlo y sellar la permanencia en Primera División para el próximo año", insistió.

Aunque el reloj corre a favor del Celta esta noche, el técnico céltico afirmó que su equipo no especulará. "Preparamos los partidos para ganarlos. Vamos a ir a por el partido desde el inicio sin especular. No lo hemos hecho nunca y no lo vamos a hacer ahora. Tenemos una idea clara, hemos sido fieles a ella durante toda la temporada y vamos a intentar plasmarla", concluyó.