La comunidad sherpa nepalí vivió el viernes una de las jornadas más tristes de su historia al morir sepultados por un alud al menos 13 de sus miembros cuando escalaban el Everest, mientras otros tres siguen desaparecidos. La tragedia llevó a otros sherpas que se encontraban en la montaña, como guías de escaladores extranjeros, a debatir la posibilidad de abandonar el Everest.