Podríamos decir que esto es la crónica de una salvación anunciada. El Celta ha prolongado su idilio en tierras andaluces asaltando los Juegos del Mediterráneo. Una conquista que permite sumar 40 puntos, la cifra marcada por Luis Enrique para renovar la continuidad en la máxima categoría. Dos genialidades de Rafinha y el gran partido de Orellana y Nolito permiten al cuadro celeste rozar la salvación.

El duelo se iniciaba con una formación inicial valiente. El atrevimiento no se le puede poner en duda a Luis Enrique. Krohn-Dehli llevaba el timón de juego del Celta, acompañado por el talento de Rafinha y Álex López. Arriba pólvora. Orellana regresaba a la banda derecha mientras que Nolito y Charles, con máscara protectora, mantendría su pulso por ser el máximo goleador céltico.

No empezó bien el Celta. Otra vez falto de tensión. Una ausencia de intensidad que estuvo a punto de aprovechar el Almería. Rodri tuvo dos ocasiones, una de ellas acabó yendo al palo, para adelantar a los locales en el marcador. El cuadro vigués supo despertar. Se rehízo de ese dominio de los hombres de Francisco a base de posesión y, sobre todo, de profundidad. El partido cambió de dueño cuando la sala de máquinas comenzó a conectar con la tripleta ofensiva.

Nolito desperdició la primera oportunidad clara para el cuadro vigués. Un mano a mano en el que Esteban adivinó las intenciones del atacante gaditano. No obstante, el "10" no perdonó por segunda vez. Recogió un remate forzado de Rafinha, que se deshizo de su marcador con un precioso caño, para batir de remate cruzado al exguardameta céltico. El Celta abría la lata. Se ponía por delante y acrecentaba la intensidad de un Almería que protestaba a Muñiz Fernández cada acción.

A partir del tanto de Nolito se vieron los mejores minutos del conjunto de Luis Enrique. Álex López y el atacante gaditano dispusieron de acciones para aumentar esa ventaja, pero la falta de puntería volvió a emerger. No erró Rodri, que aprovechó un error defensivo del Celta para igualar la contienda. Los Juegos del Mediterráneo eran una caldera. Ese arreón local volvió a encerrar a los vigueses en su campo, aunque los andaluces, con mucho corazón y poca cabeza, eran incapaces de crear opciones claras ante Yoel.

En el segundo acto Luis Enrique tocó la tecla determinante. Había que reforzar la medular. Faltaba músculo y dio entrada a Levy Madinda. La decisión surtió efecto. Los segundos 45 minutos del cuadro céltico fueron brillantes. Dominó a su adversario y, lo más importante, supo transformar sus ocasiones. Nolito asistió a Charles en los primeros minutos tras la reanudación para que el ariete brasileño volviese a "mojar" en la que fue su casa. Volvía la ansiedad para el cuadro local, incapaz de llevar la iniciativa ante un Celta que seguía opositando a conquistar los Juegos del Mediterráneo.

Luis Enrique volvía a tocar al equipo. Retiraba a Charles, que fue ovacionado por la parroquia local, para dar entrada a la veteranía de Mario Bermejo. El vendaval celeste no se resintió. Nolito aprovechaba una asistencia de Orellana para dejar encarrilado el partido. Poco después, el internacional chileno culminaba una preciosa jugada colectiva para firmar la sentencia.

El preparador asturiano optó por reforzar la medular con un pivote nato como Fontás. Retiró a Rafinha y apostó por Íñigo López. El tanto de Óscar Díaz fue una mera anécdota. Yoel no pudo hacer nada para que el excéltico redujese distancias. El partido estaba visto para la sentencia. En esta ocasión no habría sufrimiento. El Celta y el celtismo deben asimilar esta nueva sensación. Con los tres puntos sumados, la permanencia es casi un hecho, una salvación que se podría firmar de forma definitiva el próximo 28 de abril, lunes, en Balaídos con la visita del Valladolid. El objetivo, a un paso.

Ficha técnica:

Almería: Esteban; Nélson, Tébar, Trujillo, Mané; Verza (Corina, 57´), Azeez, Suso (Óscar Díaz, 64´), Aleix Vidal; Soriano (Jonathan, 29´) y Rodri.

Celta: Yoel; Hugo Mallo, Cabral, Fontás, Jony; Krohn-Dehli, Álex López (Madinda, 46´), Rafinha (Íñigo López, 77´); Orellana, Nolito y Charles (Mario Bermejo, 66´).

Goles: 0-1: Nolito (18´); 1-1: Rodri (39´); 1-2: Charles (51´); 1-3: Nolito (69´); 1-4: Orellana (74´); 2-4: Óscar Díaz (87´).

Árbitro: Muñiz Fernández (comité asturiano). Mostró tarjeta amarilla a Verza, Mané, Tébar, Óscar Díaz y Rodri por parte del Almería.