Luis Enrique Martínez, entrenador del Celta, compareció en la sala de prensa de Balaídos visiblemente satisfecho por un resultado peleado sobre la cuerda floja que acerca un poco más al Celta al objetivo de la permanencia. "Le doy mucho valor a este punto", confesó tras el choque el preparador céltico, que ve a su equipo reforzado para afrontar el tramo decisivo del campeonato. Y añadió: "Estoy muy contento, creo que es un punto que tiene un valor moral al hecho de haber empatado un partido".
Luis Enrique hizo un detallada lectura de lo ocurrido sobre el terreno de juego. "Al inicio nos ha costado, en los primeros minutos nos ha pesado, no sé si por el calor o la tensión. Luego hemos encajado un gol y hemos podido encajar algún otro. Afortunadamente no fue así, el equipo adquirió confianza a través de sus mecanismos de juego y conseguimos empatar", explicó. "Luego, al inicio de la segunda parte, la expulsión nos condicionó. Pero muy bien, el equipo da dado un plus y la afición también ha estado muy centrada en la importancia del partido", agregó el técnico, que remachó: "Y el fútbol es así de caprichoso que al final hasta pudimos haber ganado, es verdad que con un gran riesgo y exigiéndoles a los jugadores más del cien por cien".
El entrenador asturiano afirmó que el punto rescatado ayer refuerza al Celta "para jugar las cinco finales que nos quedan, empezando por la primera en Almería contra un rival directo y que será clave para nuestro objetivo de mantener la categoría".
Luis Enrique elogió la desenvoltura con que su equipo se manejó en inferioridad numérica ante un gran rival. "Si ya está todo igualado once contra once, jugar con diez ante un rival de este nivel es muy complicado. Los jugadores de la Real son de un nivel superior al nuestro, sobre todo los de arriba, que son de los que mejor hacen transición en la Liga, que no te perdona en este tipo de situaciones", observó el preparador céltico, que precisó: "Hemos superado estos momentos de debilidad y el equipo ha estado muy bien. Estoy muy contento. Nos refuerza mucho para lo que queda". El entrenador del Celta no quiso olvidarse del papel de Mina, Orellana e Íñigo López, que entraron en la segunda parte, en el buen resultado obtenido. "Quiero destacar a los jugadores que han entrado desde el banquillo porque para un entrenador es esencial que los que entren desde el banquillo aporten y que no se duerma nadie", comentó Luis Enrique, que calificó de "técnica" la decisión de reservar a Charles y no puso reparo alguno a la expulsión de Aurtenetxe, que atribuyó a un mal control en campo contrario.
