La organización del Medio Maratón Gran Bahía Vig-Bay ya piensa en 2015. Después de organizar de modo satisfactorio y sin incidencias la decimoquinta edición de la carrera, esta semana empezarán con las reuniones por áreas para ver qué se puede corregir y mejorar para la próxima cita.

En los planes de la Vig-Bay entra la posibilidad de ampliar el límite de participantes, hasta por lo menos 5.500. "Es una serpiente voluminosa ya", indica la responsable de la organización Pilar Ruiz. "Es una multitud para nuestra organización, pero al final todo ha salido bien y estamos muy satisfechos", añade.

La opción de seguir creciendo dependerá, sin embargo, de la opción de optimizar el espacio en la llegada a meta. "El paseo se nos queda pequeño. No había ni un hueco. La llegada a meta de corredores fue continua", prosigue.

Para seguir creciendo deben estudiar nuevas posibilidades, que pasarían por otro uso del parque de la Palma. "Ahí habría 10.000 metros cuadrados para ubicar la zona del corredor para que los atletas pudieran llegar cómodamente", apunta. Es una posibilidad que tendrán que estudiar para el próximo año. Nunca se plantearían, eso sí, un aumento en el número de participantes si ello fuera a repercutir negativamente en la atención a los corredores. En este sentido, piden apoyo institucional y del Concello para estudiar nuevas posibilidades para que la carrera pueda seguir creciendo manteniendo su calidad.

Mucho ha medrado el pelotón desde la primera edición, hace quince años. Por aquel entonces apenas 500 corredores cruzaron la meta. Ayer llegaron hasta Baiona 4.621.

Es una cita fija en el calendario de muchos atletas populares. Los hay que nunca fallan. Concretamente 32 de ellos recibieron el domingo un sentido homenaje por haber completado todas las ediciones de la Vig-Bay. "Fue muy emotivo. Se les entregó una camiseta y una medalla que ponía por detrás "Perseverancia y Sacrificio". Entre estos homenajeados figuraba el incombustible Elías Domínguez o el alma máter de la prueba, Eduardo Vieira.

"Es un evento deportivo que mueve muchas cosas alrededor de la carrera", explica Pilar Ruiz. En este sentido, quiso agradecer el apoyo de los operativos de Protección Civil de Vigo y Val Miñor, de Tráfico y de la Policía. "Sin todos ellos sería imposible llevar todo esto a cabo. En el trabajo del día a día somos pocos, pero en el día de la carrera se movilizan hasta 600 personas velando para que todo salga bien".

Le sobran motivos a la Vig-Bay para seguir creciendo aún más. La falta de espacio es el problema.