El asalto del Barcelona para hacerse definitivamente con los servicios de Neymar va camino de convertirse en un culebrón. El club azulgrana ha acelerado las gestiones para fichar a la perla brasileña. Desde hace unos días, el director de fútbol del club azulgrana, Raúl Sanllehí, se encuentra en Brasil y y habría ofrecido 27 millones de euros , según publicó el diario "O Estado de São Paulo".

Sin embargo, las dificultades que suponen que los derechos del jugador estén en situación de multipropiedad complica las gestiones del club azulgrana, que se encuentra con diferentes versiones de las partes implicadas sobre las verdaderas intenciones del futuro de Neymar.

El Santos es propietario del 55 por ciento y de los derechos federativos; el grupo DIS (Sonda) tiene un 40 por ciento, y Teisa dispone del 5 por ciento restante. Ayer, el presidente del club brasileño Odilio Rodrigues decía que la oferta económica presentada por el Barcelona para fichar a Neymar "no ha gustado" al Santos, por lo que "las negociaciones deben continuar", aunque reconoció que el deseo del jugador es vestir de azulgrana: "La preferencia de Neymar es el Barça y, por eso, hemos empezado a hablar. El Barça nos ha trasladado una propuesta y debemos seguir negociando", insistió.

Un día antes, otra de las partes implicadas, el grupo DIS, a través del empresario Delcir Sonda, aseguraba que tendrían que cambiar "mucho las cosas" para que la estrella brasileña no recalara la próxima temporada en el Barcelona. "La previsión es que irá al Barcelona, porque el contrato está guardado con llave allí", dijo Sonda.

En la otra parte de la balanza, se encuentra el padre de Neymar, que no niega los contactos con el Barcelona, pero asegura a la vez que también se ha reunido con el Real Madrid. El progenitor, también agente de su hijo, no descarta incluso que éste agote el contrato que le une al Santos hasta 2014, aplazando su aventura en Europa hasta después del Mundial que se celebrará en Brasil.

Precisamente, la cercanía del fin de contrato es algo que está utilizando el Barcelona para intentar abaratar la operación por debajo de la cláusula de Neymar, de 65 millones de euros. El presidente del Santos cifra el traspaso en una cantidad inferior, aunque se trate del jugador "más importante de Brasil", por lo que "se debe llegar a un acuerdo que sea satisfactorio para todas las partes", algo que parece que no será fácil.