Nueva victoria para el Mecalia Guardés, una más para sumar a su casillero en esta impresionante temporada que están desarrollando. El resultado les permite seguir puntuando para no distanciarse del Alcobendas en la lucha por la cuarta plaza de la clasificación. Es también un triunfo memorable por haberse producido en la cancha de un equipo histórico del balonmano femenino, bien que venido a menos.

El buen juego desarrollado en la primera parte por las jugadoras visitantes les permitió llevar la iniciativa del encuentro y llegar al descanso con un marcador favorable (12-15), aunque en modo alguno decisivo. De hecho, la victoria fue muy trabajada por razones que exceden la resistencia de la escuadra local.

En la segunda parte las guardesas se encontraron con decisiones arbitrales que les perjudicaron. Llegaron a jugar hasta catorce minutos con una jugadora menos. Esto a veces les hizo perder los nervios hasta el punto de que tuvieron que prescindir de su mejor jugadora, Alesia Kurchankova, en los últimos minutos de partido por haber visto la cartulina roja por acumulación de exclusiones.

Pero el Mecalia ya disponía de una ventaja de seis goles. Aunque la jugadora local Anabel Mateo se echó el equipo a las espaldas y las alicantinas se acercaron en el marcador, no lograron meter miedo a las jugadoras guardesas que ahora deben preparar muy bien esta semana su próximo partido en casa frente al Elche, segundo clasificado, ante el que intentarán seguir escribiendo páginas de oro para el Atlético Guardés.