Bm. Porriño 19

(9+10): Mariia Makarenko, Ana Rodríguez, Aloa Martínez (3), Isa Bastero, Estela Doiro (4), Sandra Costas (1), Bibi Amoedo –siete inicial-, Maialen Mugica, Paula (6), Chus (1), Carol, Cecilia (3), Lorena (1) y Alba Araújo (p.s.).

Mar Alicante 28

(14+14): Cristina Maestro, Amorós (5), Tociasen (1), Popovic (4), Isabel Ortuño (5), Krnic, Barros (2) –siete inicial-, Ana Manaut (2), María Núñez, Nuria Gracia, Laura Ortuño (1), Bea Morales (5) y Ángela (3).

Marcador cada cinco minutos: 3-0, 5-2, 5-4, 6-7, 8-10, 9-14 (descanso), 10-18, 14-20, 15-21, 17-23, 19-26 y 19-28 (final). Árbitro: Pedro José Amigo y Javier Espada, de Castilla la Mancha. Excluyeron a las locales Maialen, Ana, Carol (2), Isa y a las visitantes Barros (2), María Núñez (2), Popovic (3). Tarjeta roja por acumulación en el minuto 55, Isabel Ortuño y Laura Ortuño. Incidencias: Encuentro disputado en el Pabellón Municipal de Porriño ante unos 600 espectadores.

Las exclusiones acabaron ayer con el buen inicio del BM Porriño ante el Mar Alincante. Las de A Louriña sabían que el partido de ayer ante el Mar Alicante, uno de los conjuntos llamados a pelear por las primeras plazas de la máxima categoría, no era un choque de su liga, sin embargo, Abel Estévez y sus jugadoras también eran conscientes de que deben aprovechar cada encuentro ante su afición para intentar sumar un triunfo. En el Municipal de Porriño no se regala nada.

Esa mentalidad permitió a las locales demostrar a las alicantinas que para llevarse una victoria con la que teóricamente contaban iban a tener que sudar de lo lindo. De este modo, la intensa y agresiva defensa del Porriño le permitió iniciar el choque con un ilusionante parcial de 4-0. Pero el exceso de ganas le jugó una mala pasada a las de Abel Estévez. Tres errores en defensa provocaron otras tantas exclusiones y acabó pagándolo.

El partido se igualaba en un abrir y cerrar de ojos (5-4, min.15) y las alicantinas explotaban al máximo su superioridad numérica, llegando a contar hasta con dos jugadoras más que su rival sobre la pista del Municipal de Porriño. Por eso, la renta crecía imparable del bando visitante hasta el 9-14 con el que se llegó al descanso.

El conjunto de Abel Estévez arriesgó en defensa pero únicamente logró mantener su desventaja en los seis goles de diferencia (15-21), ante lo que el técnico del Porriño decidió empezar a pensar en el futuro. Porque la próxima semana su equipo tiene dos importantísimas citas ante sendos rivales en la pelea por la permanencia. El viernes visita la cancha del Cleba León y el martes, la del Feve Gijón. De ahí que Estévez, que ya había decidido dar descanso a Aloa, decidió que también guardasen fuerzas Isa Bastero y Estela Doiro, que reaparecía tras recuperar su tocado hombro.