Una décima parte de los 68 millones de euros que adeuda el Celta corresponden a salarios de los jugadores. En la memoria elaborada por los administradores concursales se cifra en 6,5 millones de euros las cantidades que el club tiene pendientes de pago con futbolistas que han pasado por el equipo en los últimos años.

La cuantía más elevada corresponde al brasileño Doriva Guidoni, que firmó por el Celta a principios de la década pasada. El futbolista no alcanzó el rendimiento esperado por los técnicos y acabó cedido en el Oporto. En el verano de 2003, el Celta alcanzó un acuerdo con el Middlesbrough inglés para traspasarle los derechos federativos. El jugador no se olvidó de la deuda pendiente de cobro que tenía en Vigo y planteó una reclamación ante la justicia.

A finales de septiembre pasado, el Tribunal de Arbitraje Deportivo [conocido como TAS, por su denominación inglesa], radicado en Suiza, falló a favor del futbolista, al que ahora el Celta tendrá que indemnizarle con 2 millones de euros.

Esta cantidad supone la tercera parte de la cuantía que adeuda el club vigués a los futbolistas. De los que pertenecen todavía al club, en el informe de los administradores concursales solamente aparecen Peña (352.218 euros) y Rubén (331.300), que además poseen los sueldos más elevados de la plantilla.

De los que ya no están, Jorge Larena se lleva la palma en volumen de deuda, pues según el informe concursal reclama 711.800 euros. A continuación le sigue Antonio Núñez, ahora en el Murcia, con 476.488 euros. Ambos abandonaron Vigo el verano pasado con la carta de libertad al haber concluido su contrato.

Futbolistas que estaban cedidos, como Vitolo 398.750 euros),_Areias (8.800),_Diego Costa (117.888), Agus (158.800), Pablo García (20.000), Mario Suárez (197.600) y Zanev (62.631), también están pendientes del proceso concursal porque reclaman cantidades importantes, en algunos casos.

Como al resto de acreedores, ahora el club les propondrá una quita (rebaja) máxima del 50 por ciento de lo impagado.

En esta relación también aparece Jonathan Aspas, con 20.000 euros, que abandonó el club vigués en la temporada del último descenso para recalar en el fútbol italiano.

Otros casos significativos son los de Pinto (266.434), Baiano (255.000) y Ángel (143.775), con los que el club obtuvo cuantiosos dividendos por sus traspasos. Fernando Sales, que sólo permaneció media temporada el curso pasado, reclama 200.300 euros de salarios desde febrero hasta junio, mientras que la cuantía de Manchev se eleva a 150.526, la de Placente, ahora en el Bordeaux francés, 385.914, y la de Yago Yao, en el Levante, a 20.000 euros.

De las deudas tampoco se han librado los técnicos que han pasado el último año por el banquillo celeste. Stoichkov reclama 18.583 euros; López Caro, 146.000, y Alejandro Menéndez, 7.279. Solamente Antonio López se ha librado de las penurias económicas por las que atraviesa el Celta, cuya deuda total se eleva a 68,8 millones de euros, según constataron los tres administradores judiciales que durante cuatro meses han examinado la economía del club desde la temporada 2002-2003, bajo la dirección de Horacio Gómez.