El Barcelona ha dado un paso en firme hacia la semifinal de la Liga de Campeones, al imponerse por 0-1 al Schalke 04, tras una partido serio disputado por el equipo de Frank Rijkaard.

Dado el 0-2 del Manchester United en Roma, todo apunta a una semifinal entre el conjunto barcelonista y el inglés, aunque para ello el FC Barcelona deberá redondear el buen trabajo realizado en Gelsenkirchen, donde llegaron tras recibir un duro golpe tras la derrota en Sevilla, pero que se repuso y cuajó unos 90 minutos prácticos que le llevaron al triunfo, tras un gol de Bojan Krkic, con el que se convierte en el segundo futbolista más joven en marcar en la Liga de Campeones.

El conjunto catalán no se amedrentó ante un rival muy superior físicamente y apoyado por un gran ambiente en el graderío. Inició el partido tocando en corto el balón, moviéndolo con sentido y agrupando en el centro del campo a sus tres jugadores más tácticos: Xavi, Iniesta y Touré. Los tres, en poco espacio, se valieron para volver locos a sus rivales. Bojan culminó el trabajo tras un fallo del portero.

El Schalke 04 introdujo un cambio de intensidad en el segundo tiempo, que le llevó a adelantar la línea de presión y a obligar al Barça a jugar en largo casi desde su área grande. Ello motivó que los barcelonista perdiesen algunos balones y el Schalke los aprovechase para jugar con velocidad e intentar lanzamientos desde lejos. Su acoso no revistió demasiado peligro salvo en un par de acciones.