Dos pesos pesados del panorama musical internacional se dieron cita en Galicia el 29 de julio de 1990. En una sola noche y a la misma hora dos estrellas de la talla de Prince y Madonna reunían a miles de seguidores en dos puntos de la comunidad: él en A Coruña y ella, en Vigo. El conocido como príncipe de Minneapolis congregó a más de 20.000 seguidores -llegados de todos los rincones de Galicia, Castilla y León, Asturias e incluso Portugal- en el concierto que ofreció en el recinto deportivo del colegio Santa María del Mar. No hubo ni un solo bis, pero el público salió encantado de una actuación en la que el cantante no solo interpretó sus temas conocidos sino que versionó canciones de otros artistas como Sidnead O'Connor.

Pese a la dura competencia de tener a Madonna a la misma hora en Vigo, Prince logró reunir en el que era el último concierto de su gira española a decenas de miles de personas, entre ellas rostros conocidos como Joaquín Sabina -que había grabado un especial del programa A Fala para la Televisión de Galicia y decidió prolongar su estancia en tierras gallegas- o el líder de Os Resentidos, Antón Reixa. Con el tráfico cortado desde el puente Pasaxe hasta Os Castros, casi tres horas antes del inicio de la actuación se abrieron las puertas para permitir el acceso al recinto. Quienes no quisieron perderse la cita fueron quienes optaron por seguir el concierto desde la ría, en barcos que permitían escuchar el concierto del Santa María del Mar. Tan solo quince minutos después que Madonna y tras la actuación de los teloneros, Lois Lone, Prince saltaba al escenario coruñés para ofrecer dos horas de intenso concierto.