El alcalde de Gondomar anunció ayer la licitación en breve de las obras de construcción de una pasarela peatonal de madera sobre el río Zamáns que unirá la plaza de abastos y área del mercado, con Avenida de Curros Enríquez, conocida como circunvalación de Gondomar.

Según indicó la obra "mejorará el acceso de los viandantes a la zona comercial, y dará continuidad al paseo fluvial desde Ponte de Rosas, hasta entroncar con el diseñado desde Mañufe a Donas".

La obra de la pasarela se enmarca en un proyecto global para la zona, mucho más ambicioso, que incluye al acondicionamiento de los márgenes del río Zamáns más inmediatos a la zona de la pasarela en la Avenida Curros Enríquez, ampliando la acera y la construcción de un paso de cebra sobre-elevado atravesando la circunvalación, de forma que se cree una continuidad peatonal hasta los aparcamientos del lado opuesto de la calle.

Según explicó, el proyecto, con un ámbito de actuación de 142 metros cuadrados de superficie y presupuestado en 123,583, 51 euros, tendrá un plazo de ejecución de cuatro meses y su licitación está solo pendiente del informe definitivo de Augas de Galicia, que con fecha de 16 de septiembre solicitó al Concello de Gondomar la elaboración de un estudio hidro-meteorológico de caudales que está en marcha.

La financiación de estas obras correrán integramente con cargo al Plan Concellos de la Diputación

El alcalde, Paco Ferreira, explicó que la idea se esta actuación es comunicar espacios y dar servicios a la urbanización de As Garzas y a toda esa zona.

"De esta forma se atiende a una reivindicación de los comerciantes y de los usuarios de la zona, ya que con esta solución no es necesario acceder con el vehículo al área comercial, pues en el entorno de la circunvalación hay suficientes aparcamiento lo que permitirá llegar acceder en menos de 30 segundos al área comercial" .

Según el anteproyecto técnico, la pasarela tendrá una longitud de 22,65 m. y una pendiente constante del 6% que permitirá salvar el desnivel existente entre los dos puntos a conectar.

Además se plantea como una estructura lineal de perfiles de acero laminado de trazado recto y pendiente constante sobre la que apoyan traviesas de madera de teca, tratada y antideslizante. Dicha estructura de acero "se apoyará en dos puntos intermedios que se cimentarán en pozos de relleno actual mejorado ya que el terreno no reúne las condiciones necesarias para la cimentación".

Según los técnicos, se pretende realizar una estructura lo más amplia y elevada posible a efectos de no crear obstáculos a la trayectoria del río Zamáns y las reiteradas inundaciones que se producen en la zona.