El grupo ecologista Adenco ha manifestado su oposición a la utilización de pavimento con vidrio en algunos tramos de la senda del río Tea, considerándolo "inadmisible".

Tras múltiples procesos, ahora las administraciones implicadas han decidido retirar parte de la ruta y que se desvíe para evitar alteraciones, entre ellas las que afectaban al Castro da Croa. No obstante, dicha restauración contempla la utilización de este tipo de pavimento el cual, según indican desde Adenco, "afectará nuevamente al hábitat prioritario de la Red Natura 2000", considerando que "esta actuación solo servirá para aplazar la acción del río que, en las áreas inundables, volverá a reclamar lo que es suyo".

Adenco asegura que en su lucha contra la "irracionalidad de las actuaciones vinculadas con las sendas fluviales realizadas en el río Tea, el tiempo nos ha dado la razón provocando la llegada de cientos de toneladas de jabre y de maderas al curso fluvial y el malgasto de cientos de miles de euros que solo sirvieron para afectar al espacio protegido".