Nunca tuvo un nombre oficial pero se ganó el popular de "fonte seca" con el paso de los años. Habrá que rebautizarla con otro porque la fuente de Praia América vuelve a brotar medio siglo después de apagarse el manantial que la surtía. El Concello ha rehabilitado su estructura, diseñada en 1950 por el arquitecto Enrique Álvarez-Sala y Moris, y le ha devuelto la función que dejó de cumplir poco más tarde de su construcción.

La iniciativa ha generado cientos de comentarios en las redes sociales. Y es que la fuente es un todo un emblema de la zona por los recuerdos entrañables que genera. Está presente en cientos de álbumes de boda de la segunda mitad del siglo pasado, cuando numerosas parejas de recién casados se acercaban allí para inmortalizar su felicidad.

Tras la limpieza de la piedra, se le incorporará en los próximos días un pedestal con una cruz ornamental en la cúspide, además de cuatro caños para que fluya el agua como en el boceto original.

La recuperación de la fuente se enmarca en un proyecto de mejora del espacio público ubicado entre Praia América y Monte Lourido, cuyo importe asciende a 13.333 euros, financiados al 90% por la Diputación. El reloj solar próximo que se encontraba abandonado también ha sido reparado y el entorno contará en breve con cuatro bancos, "de maneira que se convertirá nun verdadeiro punto de descanso e encontro entre os veciños e para o recordo, xa que incorporará un panel informativo con fotografías sobre as antigas casetas de Ramiro a pé de praia", señala el alcalde Juan González.

El proyecto forma parte del plan de acondicionamiento del sendero azul entre Monteferro y Monte Lourido que el organismo provincial lleva a cabo.