"Honrado, honesto, dedicado y defensor de su pueblo". Así definen a Oswaldo Lino González Pereira sus vecinos y amigos y por ello, tras cumplirse un año de su fallecimiento, han decidido rendirle un homenaje. El que fuera alcalde de As Neves durante 22 años, y también diputado provincial, dejó un reseñable legado de obras en el municipio, "pero sobre todo muy buenos recuerdos entre sus compatriotas con sus gestos y acciones generosas y desinteresadas", afirman. Muestra de ello ha sido el numeroso público que acudió ayer a los actos que se iniciaron con una misa cantada por la Coral Santa María de As Neves, continuó con el descubrimiento de un busto delante de la Casa Consistorial y remató con la interpretación, por parte de la Banda de Música Popular de Rubiós, de la "Marcha de As Neves" compuesta por el maestro Rogelio Groba en honor a Oswaldo.

Su amigo César García, que compartió con él una legislatura, recordó en su intervención que "cuando tomó posesión de alcalde en 1983 la primera propuesta que hizo fue renunciar a cobrar una peseta. Estoy seguro que cuando dejó la política tenía menos patrimonio que cuando entró", añadía. Y es que como aseguró su hijo, Roberto González, "mi padre ha sido un ejemplo de dedicación, de honradez y honestidad, buscando siempre el bien común", siendo este homenaje una clara muestra de que no se ha dejado morir su recuerdo "y que siga siendo motivo de unión entre todos los nevenses sin distinción".

A pesar de que no se trató de un acto político, destacó la presencia del vicepresidente de la Xunta en funciones, Alfonso Rueda; el conselleiro de Sanidade en funciones, Jesús Vázquez; el director de Portos de Galicia José Juan Durán, el exconselleiro Víctor Vázquez Portomeñe, del cual llevó el nombre el auditorio municipal impulsado también por el homenajeado; el alcalde de As Neves Xosé Manuel Fernández, junto con miembros de la corporación actual y de otras anteriores, compañeros de Oswaldo.