El suministro municipal de agua en As Neves está restablecido para el consumo humano desde ayer por la mañana. Después de distintas analíticas en diferentes tramos de la red, el Concello levantó totalmente las restricciones y los vecinos ya pueden consumir agua a cualquier hora del día. De hecho el jueves ya pudieron utilizarla pero no para beber ni cocinar.

Han sido ocho días de cortes de agua y para que esta situación no vuelva a producirse, el gobierno local ha elaborado un proyecto para realizar obras de abastecimiento, por la vía de urgencia, "para estar preparados en caso de que, con las lluvias de otoño, pueda repetirse el episodio de contaminación del río Termes y el suministro restrictivo de agua" explica el alcalde nevense, Xosé Manuel Rodríguez Méndez. El ejecutivo local ya presentó esta propuesta, que consistiría en captar manantiales alternativos al río Termes, en la Diputación de Pontevedra a su presidenta, Carmela Silva, y a su vicepresidente, César Mosquer. Además, pretende presentárselo también a la Xunta y a la Confederación Hidrográfica do Miño Sil.

Durante más de una semana, el Concello de As Neves ha tenido que asumir un coste económico inesperado, todavía por calcular, para garantizar agua potable a los vecinos durante ocho horas y media al día. Tuvo que costear el alquiler diario de un camión cisterna y a veces incluso dos para transportar el agua cedida por Ponteareas, además de asumir reparaciones en la tubería, limpieza de la red o las analíticas del agua.

Para sufragar parte de los gastos ocasionados, la Diputación de Pontevedra aprobó este jueves una ayuda extraordinaria de 20.000 euros. No obstante, el gobierno de As Neves pidió ayuda económica a otras administraciones si bien aún no se han pronunciado. No obstante, la Xunta ya colaboró a través de la Axencia Galega de Emerxencias cediendo todos los días un camión cisterna y a veces incluso dos.

Desde la Consellería de Medio Rural informan que varios de sus técnicos llevan desde inicios de esta semana trabajando en el monte quemado para adoptar medidas que eviten un nuevo arrastre de cenizas.