La nave principal del astillero guardés Joaquín Castro, en A Pasaxe, estuvo a punto de ser alcanzada por un incendio iniciado en material de desguace de barcos que se encontraba en el exterior, fundamentalmente tablas de madera amontonadas.

Las llamas llegaron a afectar una claraboya de uralita que quedó seriamente afectada, al igual que la pared exterior de la nave, pero no entraron en el interior, ni afectaron a los depósitos de combustible.

Según el alcalde de A Guarda, Antonio Lomba, "gracias a que los servicios de extinción trabajaron con celeridad y conciencia, se evitó que los daños fuera mayores".

El fuego podría ser de consideraciones importantes ya que la nave alberga diverso material inflamable. Los bomberos del Baixo Miño consiguieron controlarlo tres horas después de iniciarse.

Causas desconocidas

Las llamas comenzaron por causas que se desconocen en torno a las 16.00 horas y pasadas las 19.00 horas, los servicios de emergencias han comunicado que la situación estaba bajo control.

Fue un particular el que dio aviso cuando vio que salía humo de la madera amontonada.

Al lugar del incendio se trasladaron los Bombeiros del Baixo Miño, el GES de A Guarda, Protección Civil, Urxencias Médicas y Guardia Civil. También se desplazó una ambulancia del 061, una brigada de Medio Rural con una motobomba, trabajadores de la comunidad de montes y la Policía Local de A Guarda.

Además de la madera amontonada, alguna de ella con pintura y barniz incrustado, también se quemó una pequeña superficie de vegetación de la zona dunar, con xestas y hierba, al parecer sin demasiada importancia.

El astillero, que se encuentra ubicado en terrenos de la Comunidad de Montes de Camposancos, fue uno de los más importantes astilleros para embarcaciones de madera, capaz de realizar réplicas de naves históricas, y es uno de los pocos especializados en estos materiales, aunque también trabaja en buques de casco metálico y de fibra, tras su renovación.