En el período que comprende los siete meses transcurridos entre enero y julio de este año, el Concello de Mos ha concedido un total de 194 licencias urbanísticas, lo que supone un incremento del 14 por ciento con respecto al mismo intervalo de 2015. Si se analizan los datos en función del tipo de permiso concedido, se constata que todos han experimentado un aumento excepto el que tiene que ver con licencias de obras menores, algo que desde el Concello estiman que se produce debido "a que muchas de las licencias de este tipo de obras ahora se tramitan por comunicación previa, una opción diseñada para agilizar los trámites de concesión, por lo que pasan a computar en otro apartado".

En el resto de modalidades, los números suben. De este modo, destaca por ejemplo que la cifra de permisos para obras mayores expedidos se sitúa en 30, frente a los 21 concedidos en el mismo período del pasado año. El número de licencias de actividad, comunicación previa y declaración responsable pasa de las 42 registradas en 2015 a las 64 tramitadas en lo que va de año, mientras que en lo relativo a las licencias de primera ocupación el departamento de Urbanismo mosense realizó un total de 10 este 2016 por las 6 que elaboró en el mismo intervalo del pasado año.

Desde el consistorio confirman que también se han registrado aumentos en los apartados de "fuera de ordenación", licencias de taxis y permiso de vados para viviendas y edificios situados en diferentes punto del término municipal.

Más personal en Urbanismo

Tanto la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, como la concejala de Urbanismo, Julia Loureiro, coincidieron en señalar que "todos estos avances se consiguieron gracias al personal trabajador", destacando que "el departamento de Urbanismo está integrado por una plantilla estable desde que en 2009, cuando llegamos al gobierno de Mos, comenzamos a cubrir las plazas vacantes".

Aseguran ambas representantes municipales que cuando llegaron al gobierno en 2009, "el de Urbanismo era un departamento caótico y deficitario, tanto en medios como en personas; un departamento estanco en el que tan solo se tramitaban unos pocos expedientes que, a su vez, demoraban años en ser resueltos".

En este sentido, Julia Loureiro explica que "para llegar a la plantilla actual, en el año 2009 se cubrieron las plazas de arquitecto e ingeniero industrial municipales, pues hasta ese momento tan solo existían en Mos las figuras del arquitecto técnico y un auxiliar administrativo, mientras que el resto de arquitectos, jurídicos y administrativos eran personal con contratos temporales que iban cambiando con muchísima frecuencia, con todos los inconvenientes que esa temporalidad conlleva".