El pleno de la corporación municipal de Soutomaior dio luz verde a la adhesión al convenio de colaboración entre la secretaria general de instituciones penitenciarias y el Concello por el que se regula el cumplimiento de las penas de trabajo en beneficio de la comunidad en el ámbito de este municipio.

Se intenta, de esta forma, dar cobertura a esta tipología tan variada de penados. El Código Penal de 1995 incluyó los llamados "trabajos en beneficio de la comunidad", ya recogidos con anterioridad en los procesos penales para menores. Recientemente, las reformas incluidas en materia de seguridad vial han multiplicado el número de personas condenadas a este tipo de pena y cuyo perfil responde al de un ciudadano con trabajo, estudios e insertado en la sociedad.

Las penas de trabajo en beneficio de la comunidad se configuran como una forma de un cumplimiento sustitutivo de la pena privativa de libertad, que será impuesta por el juez, previo consentimiento del penado, y que obliga a éste a prestar su cooperación en determinadas actividades de utilidad pública, que podrán consistir en labores de reparación de los daños causados o de apoyo y asistencia a las víctimas.

El regidor local destacó que las tareas que realicen estas personas no serán retribuidas en ningún caso y este convenio no genera coste alguno para el consistorio. "Además, se creará una comisión mixta con instituciones penitenciarias para realizar un seguimiento del convenio, que tendrá una duración de un año", explicó Reguera. Por su parte, el organismo dependiente del Ministerio del Interior asume la gestión, la coordinación y seguimiento de la pena mediante contactos con los responsables de los trabajos.