Arcade celebró ayer la primera jornada de su gran cita culinaria dedicada a la ostra con la presencia de numerosos asistentes que a pesar de la lluvia no quisieron perderse la oportunidad de degustar el molusco que da fama a la localidad. Los organizadores de la fiesta gastronómica, de Interés Turístico desde 2002, confían en alcanzar los 30.000 asistentes durante las dos jornadas, en las que se calcula que los comensales degustarán unos 100.000 ejemplares de ostras.

La principal novedad de esta edición es el acuerdo alcanzado entre el Concello y los mariscadores para el aprovechamiento de las conchas del molusco, que se reutilizarán para la reparación de barcos de pesca tradicionales. Los restos de las ostras se van a triturar para obtener una pasta que resulta de gran valor para la restauración de esta clase de embarcaciones.

Los precios establecidos para esta edición de la fiesta son de 6 euros para la docena de moluscos, que se servirán al natural o en escabeche. Además se podrán adquirir raciones de empanada y botellas de vino albariño de la zona (8 euros) y ribeiro (4 euros) como acompañamiento.

Al igual que el año pasado, para mayor comodidad, tanto de los asistentes como de los encargados de los puestos, la fiesta se instalará en el nuevo aparcamiento de la zona portuaria, no muy lejos de su tradicional ubicación.

Alrededor de 50 personas trabajan directamente en la fiesta gastronómica. La Policía Local de Soutomaior cuenta con refuerzos de municipios vecinos para organizar el tráfico en la zona.