Una empresa encargada por la Dirección Xeral de Mobilidade de la Xunta de Galicia se trasladó ayer a Ponteareas para iniciar un análisis de la situación en la que se encuentra la estación de autobuses con el objeto de iniciar un proceso de nueva licitación, una vez que el Concello de Ponteareas renuncia a continuar con su gestión.

Según explicó ayer la concejala de Seguridade e Tráfico de Ponteareas, Vanesa Fernández, la empresa, encargada por la Xunta, realizará la valoración del estado de la estructura y anomalías que pueda tener el edificio, con el objeto de reparar los desperfectos que pudieran existir.

De esta forma se inicia el proceso para que la Xunta se quede con la estación de autobuses cuya gestión rechaza el Concello, al considerar que es un servicio externo.

Mobilidade no gestiona directamente ninguna estación de autobuses, y pondrá en marcha un proceso de licitación para que sea una empresa la que se encargue de su gestión a partir de este momento.

La concejala ponteareana mostró ayer, en nombre del gobierno local, su satisfacción por la decisión de la Xunta de "de una vez por todos ponerse manos a la obra". La edil indicó, sin embargo, que además de quedarse con la estación de autobuses, la Xunta debe resarcir al Concello de Ponteareas por el gasto que ocasionó el servicio desde 2011, después de terminarse el periodo de concesión y de que se comunicase a la Xunta la decisión de devolver el servicio.

El Concello de Ponteareas había enviado a principios del pasado mes de febrero una carta urgente a la Dirección Xeral de Mobilidade, para que fije una reunión que permita tratar el traspaso de la competencia de la estación de autobuses de Ponteareas a la Xunta.

Cuatro meses antes la corporación municipal aprobó una moción en la que se exigía a la Xunta que asumiese la competencia de la estación de autobuses y también el déficit generado desde 2011. El alcalde Xosé Represas había indicado que "hasta ahora el consistorio no ha recibido respuesta alguna por parte de la Dirección Xeral".

El gobierno ponteareano recuerda que aquella moción había sido apoyada por todos los grupos excepto EU-Son y que la propia Xunta reconoció en 2013 en un comunicado la necesidad de realizar un traspaso de competencia "dado que no resulta viable mantener ilimitadamente la situación de transitoriedad actual" y por lo que se informaba que "el Concello de Ponteareas cesará en la explotación de la estación de autobuses de Ponteareas a partir del 1 de enero de 2014, fecha a partir de la que entraría a explotar el servicio un nuevo prestatario, si fuera el caso".