El Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra sacó a subasta la factoría y oficinas de Berbescon en Salvaterra de Miño.

Los bienes que subasta la administración concursal es lo que queda de la empresa Berbescon, filial del grupo Frigorificos Berbés. Ambas entraron en concurso voluntario de acreedores iniciado en 2013.

Según el edicto publicado por el Juzgado de lo Mercantil por el que se inicia la subasta pública, el juzgado pretende vender la factoría de proceso de elaboración de productos derivados de pesca y las oficinas en el Polígono Industrial de Chan da Ponte, que suman en total más de 8.000 metros cuadrados construidos.

Las obras cuentan con varias cargas a través de hipotecas con distintas entidades bancarias que suman unos diez millones de euros.

La compañía entró en proceso de liquidación en abril de 2013. Tanto Frigoríficos Berbés como Berbescon ya no tenían empleados entonces, una vez que el juez accedió a rescindir sus contratos para que pudiesen inscribirse en los servicios de públicos de empleo y cobrar la prestación por paro.

La compañía, que empleaba a 93 personas en Vigo y Salvaterra, sufrió durante los últimos años una dura crisis que afectó a su cuadro de personal de forma dramática.

La empresa dejó de funcionar con un pasivo acumulado superior a los 14 millones de euros, y fue la administración concursal la que decidió cerrar la planta ante la inviabilidad de la misma.

Frigoríficos Berbés mantuvo en los últimos meses de actividad a su plantilla bajo un expediente de regulación temporal de cuatro meses, y solicitó prórroga de otros dos. Sin embargo no llegó a poner en marcha el último de ellos y decidió solicitar un concurso voluntario de acreedores. Cuando cerró adeudaba más de tres nóminas a sus trabajadores, la mayoría de entre 55 y 61 años, según los sindicatos.