El Banco de Tapóns do Baixo Miño, con sede en Tomiño, ha hecho entrega esta mañana de tres cheques por valor de 9.000 euros a tres menores de edad que sufren enfermedades raras.
El presidente de la asociación, Manuel Pardo, pudo entregar 3.000 euros a cada niño gracias a los 42.000 kilos de tapones recolectados y clasificados gracias a la ayuda de cien voluntarios. Los destinatarios de esta iniciativa han sido Alejandro Barbosa, un vigués de seis años y con parálisis cerebral. Sus padres han anunciado que destinarán los 3.000 euros a la compra de un andador especial. Sofía Santos, natural de Pontevedra, tiene tres años y empleará la ayuda en terapia. La niña padece ceguera neonata y una malformación. Cristian Castro, por su parte, es un niño de Ourense de 10 años con malformación cerebral y que también utilizará en terapias sus 3.000 euros.
Esta ha sido la décima campaña de recolección de tapones del colectivo del Baixo Miño, que se fundó hace ya tres años.
