Los residentes del entorno de la Estrada do Galleiro (EP-2906), en la parroquia redondelana de Vilar de Infesta, ven por fin luz al final del túnel. Después de más de un año soportando molestias y continuos problemas por la reforma de este vial, los trabajos se encuentran a punto de rematar tras el gran avance realizado en el último mes. "Estamos satisfechos porque después de permanecer tres meses con las obras casi paradas, en los que los operarios apenas aparecían por el lugar y todo parecía abandonado, la situación ha cambiado y cada vez está más cerca la conclusión de los trabajos", explica el presidente de la Asociación de Vecinos de Vilar, Eduardo Rodríguez.

Los vecinos se quejaron a finales de septiembre de los numerosos problemas que padecían y de la falta de información sobre las causas del lento avance de los trabajos. Las aceras se encontraban inacabadas en varios puntos y obliga a los peatones a invadir la calzada, los antiguos postes del tendido eléctrico se mantenían en medio de la calzada con riesgo para los vehículos y nada se sabía de los demandados pasos de peatones elevados para reducir la velocidad del tráfico.

Sin embargo, en las últimas semanas la compañía Fenosa retiró la mayor parte de los postes de alumbrado y procedió al soterrado de las líneas eléctricas, y también la empresa adjudicataria Covsa asfaltó la calzada y construyó cinco pasos de peatones con resalte, como solicitaban los vecinos. "Todavía falta por instalar la señalización vertical, retirar algún poste en el tramo inicial y reparar los accesos a varias casas, pero la situación es ya muy distinta y estamos contentos", señala Rodríguez.

Otro de los asuntos que preocupan es la red de pluviales, ya que en el temporal que hubo en septiembre se acumularon grandes balsas de agua en la carretera. El test definitivo será en los próximos meses de invierno.