El Concello de Ponteareas le debe más de 150.000 euros a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil en concepto de sanciones y de canon de vertidos. Así lo reveló el alcalde ponteareano, Xosé Represa, quien al tomar posesión solicitó a este organismo un informe con las deudas contraídas por el consistorio.

La Confederación remitió recientemente al regidor un listado de deudas que suman 151.300 euros, de las que 56.480 euros se corresponden con multas y sanciones y la mayoría de ellas se generaron durante los últimos cuatro años, según aseguran desde el Concello.

Represas apunta que la situación "es doblemente grave porque además del daño y perjuicio económico que supone esta deuda, una parte importante son sanciones y multas que revelan que el ayuntamiento vino siendo uno de los principales agresores medio ambientales de Ponteareas, básicamente sobre el río Tea".

El alcalde solicitará a la Confederación el historial de sanciones y multas impuestas al Concello en los últimos diez años "para saber lo que nos costó a los ponteareanos tener un gobierno incapaz de resolver los problemas medioambientales que soporta el Tea".

Además, el regidor ya solicitó informes a los servicios municipales y a la Confederación para conocer en detalle las razones de las multas y poder solucionar lo antes posible los problemas que las ocasionaron. "La recuperación del río Tea, su saneamiento y su puesta en valor como espacio de gran valor ambiental y social será uno de los objetivos prioritarios de este gobierno" anuncia y considera que estas cifras "son un ejemplo más de la herencia recibida del Partido Popular consistente en deudas, malgasto e ilegalidades" y recuerda que el PP "tuvo la poca vergüenza, tras tomar posesión el nuevo gobierno, de afirmar públicamente que dejaban el ayuntamiento con la caja llena de dinero para el gobierno entrante" afirma.