Las movilizaciones que mantienen los vecinos de Chapela para paralizar las obras de ampliación de al autopista AP-9 en el tramo del barrio de Igrexa les pueden salir caras. Al menos así lo está advirtiendo la empresa concesionaria, Audasa, que ha enviado burofax a dos residentes de la zona en los que les informan que si mantienen sus coches particulares aparcados en lugares para entorpecer el desarrollo de los trabajos se les pasarán los gastos "por una ocupación indebida de la vía pública" y se les exigirá una compensación "por el perjuicio económico que ocasione la demora que están provocando en la ejecución de las obras".
Desde la Asociación de Afectados por Ampliación de la Autopista califican de "inaceptable" que se intente atemorizar a los vecinos con este tipo de misivas, firmadas por la asesoría jurídica de la empresa. "Este tipo de amenazas no ayudan en nada a resolver los problemas que padecemos los vecinos y pueden incluso tensar más la situación. Si piensan que así van a amedrentarnos para que les dejemos retomar las obras están muy equivocados, porque nuestra intención es seguir con las concentraciones hasta que atiendan nuestras demandas, resuelvan las expropiaciones y nos garanticen la reposición de los servicios afectados", apunta Francisco Puch, uno de los portavoces de la plataforma vecinal.
Este colectivo señala además que los escritos enviados contienen importantes irregularidades, puesto que en ningún momento identifican los coches ni sus matrículas. "No se sabe si pertenecen a estas personas, puesto que en ningún momento se citan ni los modelos de vehículos ni sus matrículas, y también carecen de un informe de las autoridades competentes. Si se cometiera alguna infracción debería constar un acta firmado por la Policía Local, y aquí no hay nada", apunta Puch.
