Juan Paulo Giménez, uno de los hijos del "rey de los gitanos" de Galicia, declaró ayer en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Tui como imputado por un delito de estafa, denunciado por M. F., carnicero de Oia.

Declaró como imputado "para salvaguardar todos sus derechos", según precisó su letrado, y negó todos los hechos que se le atribuyen, como el de haber recibido un dinero a cambio de una furgoneta, en enero de 2014.

Negó ante el juez que se diese después a la fuga, pues "tiene domicilio conocido" y añadió que no hay testigos directos de la entrega del dinero, por lo que es su palabra contra la del denunciante.

El abogado de Giménez relacionó la denuncia de M. F. por su parentesco con el guarda forestal que entró en la casa de Olegario Giménez, "rey de los gitanos", acompañado de un guardia civil. A juicio del letrado, esta denuncia "sería una cortina para dar cobertura al motivo alegado por el guarda forestal para justificar su entrada en la casa de Olegario, diciendo que era para cobrar la deuda de un primo". Anuncia la posible presentación ante el Juzgado de una denuncia de Juan Paulo Giménez por "denuncia falsa" .