Las abundantes precipitaciones a lo largo del pasado invierno, incluidas las de los últimos días, ya iniciada la primavera, generan un importante excedente de agua en el embalse de Baíña, que abastece a gran parte de los hogares en el municipio de Baiona. El Concello se ve obligado a abrir las compuertas para evitar desbordamientos y la cantidad desalojada es tal que se genera una catarata digna de visita. Estos jóvenes miñoranos posaron ayer ante la cámara para dejar constancia de la espectacularidad del fenómeno.