Tendrá un coste estimado superior a los dos millones de euros y dará servicio a 10.000 habitante; éstas son las características de la Estación Depuradora de Aguas Residuales -EDAR- que se comprometió la Consellería de Medio Ambiente a construir en el polígono industrial de A Cañiza. La nueva depuradora no será para uso de las empresas sino, exclusivamente, para los particulares. Las empresas que quieran verter a la EDAR de la Xunta necesitarán, cada una, tratamiento previo de sus aguas residuales y usar la depuradora propia del polígono.

Después del compromiso de la Xunta, ahora es necesario que el Concello de A Cañiza ceda los terrenos y realice los requisitos administrativos, presupuestarios y técnicos necesarios como entidad local competente. Todo ello es lo que ha exigido el grupo municipal socialista en una moción presentada el 24 de diciembre después de que los cinco ediles se acercaran al río Deva para observar, in situ, la zona que padece los vertidos contaminantes.

En un comunicado el PSOE de A Cañiza, cuyo portavoz se reunió recientemente con el delegado provincial de Medio Ambiente, Juan Froján, exige al Ejecutivo local que colabore también, "adaptando o regulamento municipal de verquidos a rede de sumidoiros ó da Xunta" teniendo en cuenta que tiene "responsabilidades legais como xestora do polígono" añade.

Los socialistas demandan inmediatez en la colaboración del gobierno cañicense y confían en que, gracias a la financiación íntegra de la Xunta, se acabará con un problema de contaminación que ha llegado a afectar a los vecinos de Crecente, que después de veinte años, el río Ribadil continúa recibiendo aguas residuales del polígono.