Rosendo Sánchez Cardell, presidente del Tyde F. C., todavía conservaba ayer la grata aureola del triunfo conseguido el pasado domingo, cuando el equipo de 20 jóvenes tudenses aseguraba su ascenso a Segunda Regional, el primer avance que consigue en los últimos diez años. Con el sonido estridente de las bocinas de los coches, y los gritos eufóricos del Tyde clamando a los cuatro vientos el hito deportivo, se ha dado carpetazo a una etapa gris.

El Tyde se fundo en 1908 y prepara su centenario, dice Rosendo Cardell, que es presidente desde septiembre de 2007 y ayer recordaba especialmente emocionado a su padre, Antonio Sánchez Franco "que fue el mejor presidente que tuvo el Tyde".

- Parece que le dura la euforia

- Así es. Lo más bonito es que después de tantos años, ayer nos acompañaron al partido de Crecente más de 300 personas de Tui. Llegaron en autobuses, en coches. Fue algo espectacular. Después del resultado, nuestro público terminó llevándonos en volandas. El Crecente perdió los nervios, el árbitro recibió un botellazo y suspendió el partido. La noche del domingo fue muy larga....

- ¿Puede describir con palabras las sensaciones vividas al saber la victoria?

- Sobre todo, lo mejor es el cariño de aficionados como Sevilla y su mujer, que lloraron de emoción. Todos nos agradecían el apoyo, algo que nosotros debemos al público. El extraordinario factor humano era estremecedor. Allí estaban directivos del Club de la época de mi padre y ex jugadores, apoyándonos. Me ducharon vestido, y al entrenador, Manuel Almeida, también.

- El éxito no llega por casualidad ¿qué ha influido en esa toma de oxígeno?

- Hemos cogido un club deshecho, destrozado estructuralmente. Conseguimos un grupo para poner en marcha un proyecto de fútbol base a 5 años vista, para crear cantera, que es el fútbol del futuro. Los cadetes ascendieron a Primera autonómica; y los infantiles jugaron la liga gallega.

- ¿La victoria del ascenso tiene nombre propio?

- Hay 20 jugadores en plantilla. Sin duda, el nombre propio, en lo deportivo, es el de Manuel Almeida, el entrenador que ha conseguido coordinar un equipo fantástico, con chicos de Tui.

- ¿Planes para la nueva temporada?

-Estamos todavía con la miel en la boca, pues el ascenso no era objetivo para este año. Ahora hay jugadores de Tui que estaban en otros equipos y quieren volver, sin cobrar nada, como el resto de la plantilla, que tiene una media de 24 años de edad.

- ¿Aspiraciones del colectivo?

En algún momento, cuando hayan apoyos de colaboradores, habrá que replantearse la filosofía de trabajo, pero primero ha de inculcarse el amor al club que forma al deportista como persona. En estos momentos estamos equilibrados. Los jugadores disponen de todos los medios: equipajes, transporte, fisioterapeuta, pero no cobran ni un duro. El entrenador tampoco. Igual ocurre con los restantes 9 entrenadores del club que atienden a los 250 deportistas. Antes de terminar, quiero dar las gracias a todos: directiva, jugadores y seguidores, porque me han hecho muy feliz.