El calendario deportivo se queda sin fechas para celebrar el partido pendiente de la vigésimo primera jornada entre el Celta y el Real Madrid, suspendido en su día por los destrozos que causó el temporal en la cubierta de Balaídos. Los compromisos europeos de célticos y madridistas obliga a seguir retrasando la celebración de un partido que estaba señalado para el pasado 5 de febrero. El presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, se anticipó hace unos días apuntando la posibilidad de que este encuentro se dispute entre la penúltima y la última jornada del campeonato. El dirigente incluso apuntó como posible fecha el miércoles 17 de mayo.

Los planes de Tebas han suscitado malestar entre los dirigentes del Barcelona, equipo que pelea codo con codo por el título de Liga con el Real Madrid.Si celestes y blancos pasasen a las semifinales de las competiciones europeas en las que todavía participan, sería imposible encontrar otra fecha antes que la de la última semana de la competición doméstica.

Si el partido se disputase entre las dos últimas jornadas se alteraría el acuerdo tácito de unificar horarios en la recta final del campeonato en los partidos donde haya algún puesto importante de la clasificación en juego. Tebas subrayó que no es oblitagorio mantener esa rigidez horaria en esas últimas jornadas, lo que ha provocado la sorpresa de otros muchos clubes que pudiesen verse perjudicados.