Estamos en época de matrícula, de prepararte para un futuro. Una opción es la FP. Hay mucha demanda y muchos alumnos acceden desde la ESO, chavales de 15 años que esperan encontrar en esa opción una futura profesión con más práctica y menos chapar.

Este año la solicitud hay que hacerla telemáticamente. Es decir, por ordenador. No todos los aspirantes tienen ordenador o si lo tienen no tienen impresora. Quizá no sepan cubrir adecuadamente la misma, lo que podría suponer no ser admitido.

El plazo es de 7 días naturales (26 de junio al 4 de julio -no sábados ni domingos-), teniendo que entregarla en la primera opción elegida, con un horario de 9 a 13 horas.

Todo bien para el que domina el ordenador, tiene todo lo necesario y sabe lo que tiene que presentar. El problema surge cuando tienes dudas.

Vas a informarte: 1º respeta el horario (fuera del mismo, nada más verte te dicen que estás fuera del horario, que están para otras cosas y a continuación te preguntan qué quieres. Ya no respondes, te das media vuelta y te vas). Y si preguntas qué documentación tiene que aportar te responden: "Al final de la solicitud te lo indica".

Por lo tanto, si no cubres la solicitud no sabes qué necesitas: tanto cuesta decir "una certificación de lo último que se haya cursado (ESO, FP, Bachiller, Acceso)".

Al día siguiente acudes a otro centro donde te informan adecuadamente. Tienes que solicitar una certificación del curso que acabas de finalizar en el instituto correspondiente. Presentas el pago de tasas de un determinado curso que finalizó hace una semana. Cuando lo vas a recoger te dan la de un curso de FP que acabaste hace tres años, que por cierto ya tienes y no el que deberían. Vuelta a perder tiempo, el cual se va agotando, y horas de trabajo de los padres por no tener los alumnos facilidad para desplazarse a los distintos centros (muchos son menores).

Mi pregunta es: ¿dónde está la profesionalidad de todos los implicados en este proceso? Si queremos una juventud dinámica y activa desde las instituciones no debemos procurar facilitarle los trámites? Jóvenes que en su vida cubrieron una instancia ni conocen las consecuencias por no hacerlo correctamente (se pueden quedar un año sin hacer nada por un simple documento no presentado o incorrecto).

Esta carta la escribo por haber sufrido personalmente los desagravios de algunos profesionales de la enseñanza en institutos públicos de Vigo.

Les recomiendo terapia para alcanzar equilibrio y serenidad en su profesión. Los alumnos de su centro se lo agradecerán y ustedes serán más felices.