Los gallegos, que somos gente de bien, amantes de la naturaleza que nos fue regalada, orgullosos de nuestro incomparable marco, la mejor playa del mundo, nuestros paisajes, nuestra riqueza culinaria, nuestro buen hacer del día a día en las cosas más cotidianas o de gran envergadura y comprometidos para que todos estos méritos sean reconocidos más allá de nuestras fronteras acogiendo a millones de turistas que nos visitan, con el encanto que caracteriza a los gallegos, con esta cantidad de privilegios que nos acompañan y para desequilibrar tanta maravilla, para que no sea todo tan perfecto tenemos la desgracia de convivir, soportar, aguantar y sufrir en propias carnes un monstruo llamado "clase política". Esos políticos que han sido capaces de hacernos cambiar la forma de ver las cosas para que no pensemos, no nos detengamos y fijemos en que es lo que está pasando, por qué tanto pasotismo ante situaciones en las que deberíamos revelarnos, plantar cara y decir hasta aquí hemos llegado, mostrar nuestro descontento y malestar que el mío concretamente paso a explicar:

Soy visitante habitual de las instalaciones de la antigua ETEA, lugar al que voy a pasear con mi perro pero que he tenido que dejar de hacerlo por el malestar que me crea contemplar el abandono en que se encuentran dichas instalaciones y no voy a criticar el mantenimiento de todo el recinto ya que unas corresponden al Ayuntamiento de Vigo y otras a la Xunta y esto supone un gasto tremendo. Simplemente me refiero a la limpieza de las papeleras que existen en dicho lugar, teniendo buen cuidado de saber a quien correspondía dicha limpieza me informan que concretamente las papeleras están a cargo de la Xunta, por lo tanto son ellos los responsables de su limpieza. Es lamentable e inexplicable cómo pueden tener la desfachatez y poca vergüenza de permitir la visión que ofrecen a los muchos visitantes foráneos o de nuestro país sin que se les mueva un músculo. De sobra es conocida la buena relación que existe entre el Gobierno autonómico y el concello, como la cerveza 0,0 eso es lo que estamos pagando los vigueses ¿Qué le importamos a la Xunta? Si las instalaciones de la ETEA estuvieran en A Coruña otro gallo cantaría. Ahora los políticos a los que nosotros hemos colocado en los puestos que ocupan pasan la mayor parte del tiempo trabajando para buscar en los mapas dónde se encuentran las islas Caimán, Seychelles, Barbados, Islas Vírgenes, Belice, etc., para depositar maletines y maletines cargados de "ayuda humanitaria", no seamos mal pensados, que esta gente también tiene corazón.

Qué cantidad de horas de trabajo les lleva todo esto, vaya por Dios y nosotros queriendo que nos limpien las papeleras de la ETEA como si no tuvieran más que hacer. ¡Cachis!

Me gustaría hacer un llamamiento a los distintos medios de comunicación para que se dieran una vuelta por el lugar del que estamos hablando y hagan que todo esto salga a flote publicando las fotografías de la vergüenza, testimonio fiel del pasotismo de los políticos incompetentes y esto nos debería hacer reflexionar sobre quién los ha colocado en esos despachos, ahí tenemos la prueba. Las peleas entre los políticos con el fin de llegar a la poltrona nos ha llevado a que se celebren elecciones a los seis meses de los anteriores y que nuevamente vayamos a depositar las papeletas en las urnas. Conclusión, son todos iguales, sean del color y siglas que sean, igualitos, cortados por el mismo patrón y con las mismas intenciones, lobos con piel de oveja.

Estamos todos en el mismo barco y nos gustaría que lo llevaran a buen puerto pero, esto cada vez se parece más al Titanic y sabemos cómo terminó esta historia.