La concejala de Hacienda, Luz Abalo y el concejal de Medio Ambiente y Rural Lino Mouriño, comparecieron ayer para comunicar unos pequeños cambios en la revisión de las ordenanzas fiscales y para reafirmar la postura del gobierno municipal socialista en este asunto. Señalan que sus propuestas buscan el equilibrio presupuestario y la redistribución de las cargas de forma más justa.

Una de las novedades incluidas con respecto a la propuesta presentada la pasada semana es que en el apartado de bonificaciones se incluirá una en el impuesto de circulación de vehículos para entidades sociales y sin ánimo de lucro.

También se incrementan los casos de gratuidad en la expedición de documentos municipales. Además de las excepciones ya previstas en la ordenanza correspondiente, será gratuita la expedición de documentos municipales para los trámites de becas de estudios, aportaciones por hijos derivadas de la Seguridad Social y ayudas propias de entidades de iniciativa social.

Además se crea una tasa para edificaciones fuera de ordenación y en el apartado de servicios especiales se deja claro que por la atención en emergencias se facturará a todos los implicados por igual.

Los concejales socialistas insistieron en afirmar que la subida del IBI rústico no afecta a todos los vecinos del rural, ya que pasarán a tributar 11 euros al año fincas de 7.000 metros cuadrados. La subida afecta a grandes chalés que con el cambio de la ley pagaban menos que una vivienda urbana.

Otro de los nuevos cambios está en la ordenanza por uso de suelo de dominio público. La modificación es para incluir el último tramo de la calle Ramón y Cajal y una parte de Arapiles, recientemente peatonalizadas, en el cambio de categoría para aplicación de la tasa de ocupación de dominio público para la instalación de terrazas, andamios y contenedores de obra.