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Tesoro visigodo

El templo ourensano de Santa Comba de Bande sigue desde el siglo VII sorprendiendo a quien lo visita. Rodeada de agua y naturaleza, esta joya prerrománica encierra historia, arquitectura y misticismo

Tesoro visigodo

Bande conserva una reliquia del arte, una joya visigótica que desde el siglo VII sorprende por fuera y por dentro. Probablemente sea una de las iglesias más antiguas de Galicia, una huella única del pasado, declarada Monumento Nacional en 1921. Santa Comba, en la parroquia del mismo nombre, sigue mirando hacia el río Limia, muy cerca de la Vía Nova que unía Bracara Augusta y Asturica Augusta, con el embalse de As Conchas enfrente y la geografía limiana a sus pies.

Santa Comba sobrevivió al paso de dinastías, luchas y dominaciones y, aunque no hay constancia exacta de su fecha de construcción, su origen se sitúa en torno al siglo VII. Esta obra excepcional formó antaño parte de un monasterio. Aquí viviría una pequeña comunidad de monjes cuya misión sería proporcionar auxilio espiritual y material a caminantes y peregrinos.

Tiene planta de cruz griega, bóvedas de cañón peraltadas y columnas con capiteles decorados. En el interior el templo guarda unos impresionantes frescos del siglo XVI y un antiguo sepulcro de mármol donde se cuenta que estuvo el cuerpo de San Torcuato, uno de los primeros discípulos del Apóstol Santiago, antes de ser trasladado al monasterio de Celanova.

Bande conserva entre sus piedras de granito numerosas peculiaridades y una factura arquitectónica sin igual. Entre otras, el arco de herradura ante el ábside que confirma ser un elemento visigodo anterior a la llegada de los árabes. Destaca la gran riqueza decorativa del interior, como en el caso de los frescos del altar principal, que representan a Dios Padre sobre un fondo estrellado, sosteniendo entre sus brazos abiertos al Hijo crucificado en actitud de entrega a la humanidad. La composición la completan los evangelistas con sus respectivos símbolos.

Tanto fuera como dentro el lugar irradia misticismo y espiritualidad. Fuera corre rumorosa el agua de una fuente y se conservan los restos de una capilla donde se practicaban bautismos para que los que allí acudían pudiesen entrar al templo como cristianos.

Aparte de esta iglesia, considerada por los estudiosos como una de las mejores herencias del arte visigótico en Europa, Bande tiene muchos otros lugares de visita, como el campamento Aquis Querquennis, una ocupación militar romana que probablemente controlaba el río Limia y la Via XVIII del Itinerario de Antonino o Via Nova. Se encuentra a orillas del embalse de As Conchas, calificado por algunos historiadores como uno de los mejores conservados de España.

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