Dolor en Córdoba por el hallazgo sin vida del joven Alvaro Prieto. Su muerte es una incógnita. Los investigadores barajan la posibilidad de que el futbolista muriera electrocutado al intentar acceder a un tren, entre dos vagones, en la estación de Sevilla. Su ciudad natal, Córdoba, está conmocionada.
El recuerdo de Álvaro se lleva la ovación de los aficionados del club de fútbol en el que jugaba. Sacando fuerzas, para entonarle el himno de su equipo. Su nombre iluminado por las velas, su camiseta en lo alto de la fachada del estadio. En la universidad, sus compañeros estaban en mitad de una clase cuando a sus móviles llegaba la noticia del hallazgo del cuerpo. El jueves por la mañana, tras una noche de fiesta por Sevilla, el joven perdió el tren de vuelta a Córdoba. Se quedó sin batería en el móvil. No saben por qué en vez de buscar ayuda intentó colarse en el siguiente tren de donde lo echaron por no tener billete. Las cámaras de seguridad lo grabaron a las nueve y media saliendo de la estación. Fue la última imagen de Álvaro con vida.
