Las bebidas energéticas son muy habituales entre los jóvenes. Casi la mitad de los estudiantes de entre 14 y 18 años reconoce haberla consumido en el último mes. El Gobierno se comprometió a regular su compra por parte de los menores por sus efectos en la salud y porque abre la puerta al consumo de otras cosas, pero de momento tan solo han anunciado medidas Galicia y Andalucía.