“Hubo 12 denuncias formales y 12 activaciones del protocolo, admitiéndose a trámite siete”, expone la respuesta formal, que entró ayer por registro en la Cámara alta, a una interpelación de la senadora nacionalista gallega Carme da Silva. De esos casos, cinco terminaron en la apertura de un expediente disciplinario en contra del denunciado, con tres sanciones. No constan despidos. Precisamente ayer se refirió a los múltiples casos de acoso sexual en el CSIC la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant.

Lo hizo durante el debate en el Congreso y tras ser cuestionada por la diputada Pilar Vallugera. “Es nuestra voluntad que se mejoren el acompañamiento y actuación que hacemos con las víctimas, lamentamos que muchas veces las administraciones no cubramos estas situaciones de manera adecuada. La voluntad está en mejorar”, apuntó. No se refirió al caso de Carmen Fernández ni hizo referencia a esos cinco expedientes disciplinarios. Eso sí, asumió errores en la gestión. “Reconocemos errores, pero con una clara convicción para trabajar frente a estas conductas. Las mujeres han de saber que no están solas ante el acoso”.