No queda lugar para la esperanza. Las autoridades dan por fallecidos a las seis personas desaparecidas tras colapsar el puente. Todas ellas eran operarios que realizaban labores de mantenimiento cuando se produjo el impacto. La caída desde una altura a más de 50 metros a un canal de grandes corrientes y con una temperatura del agua de 6 grados. El barco por el momento continúa encallado junto a toneladas de acero y hormigón a la espera de poder ser retirado. Se sabe que el buqué envió una señal de socorro lo que ayudó a disminuir el flujo de tráfico antes del fatal choque. El presidente estadounidense ya ha anunciado que su Administración se hará cargo del coste de la obra para reconstruirlo. El puerto de Baltimore es una infraestructura clave, uno de los mayores centros navieros del país por el que cada año pasan casi un millón de vehículos.