Con mínimas de hasta 27 grados bajo cero, el temporal que azota Iowa ha obligado a suspender la mayoría de los actos de campaña. Pero el ambiente se calienta con cada intervención de Donald Trump. El favorito en el arranque de las primarias republicanas vuelve a la carga con sus temas: que si la invasión de inmigrantes que sufre Estados Unidos; o que si el peligro de una Tercera Guerra Mundial que sólo él puede evitar. Los republicanos sí que tienen otra mundial con los ataques de Trump a sus rivales Ron DeSatis y la exembajadora en la ONU Nikki Haley, a la que apoda “cabeza de chorlito. Ambos aspiran a arañar algunos de los 40 delegados que se eligen este lunes, los que enviará Iowa a la Convención republicana de julio, cuando se designe al candidato del partido a la Casa Blanca. Sin embargo, el principal objeto de las ridiculizaciones de Trump es Joe Biden. “Nuestro presidente no puede hablar, apenas dice una frase completa”, sentencia un día después de publicar en sus redes un montaje en el que, presentando la Casa Blanca como un asilo, se burla de la edad de su residente.
