DisCamino, un proyecto que comenzó en el año 2009 para cumplir el deseo de las personas con discapacidad de peregrinar hasta Santiago de Compostela, continuará demostrando que el ser humano no tiene límites. Sobre las 10.00 horas, Javier Pitillas, su impulsor, Bea e Ismael se subieron a una furgoneta frente a la sede de Alento, en Vigo, para poner rumbo a Salamanca, donde comenzarán hoy su ruta hasta la capital gallega.