El tramo situado al lado del socavón abierto en el accidente de O Marisquiño el pasado 12 de agosto se vino abajo ayer tras un estruendo que alertó a los vigueses y turistas que estaban paseando por la zona. Momentos antes del derrumbe, según explican algunos testigos de lo sucedido, se oyó "crujir" la estructura de hormigón que da soporte al entablonado.