Desde que se dio a conocer en la cuarta temporada de OT, Edurne (Madrid, 1985) ha sabido demostrar que se le da casi todo bien: cantar, bailar, presentar, actuar, componer... Su talento y capacidad le han servido para labrarse una carrera no solo en la música, con siete discos (el último, “Catarsis”, todavía calentito) y su participación en Eurovisión, sino también en la televisión, donde ahora hace doblete como jurado de los niños cantores de “Idol kids”, en Tele 5, y presentado “Fam Jam”, el concurso para las noches de los viernes de Disney Channel. Y dentro de unos meses se estrenará en una nueva faceta, la de mamá, ya que acaba de anunciar que espera su primer hijo junto a su novio, el portero David de Gea.

–¿Qué le gustó de ‘Fam Jam’ para sumarse al equipo?

–Soy una fanática de Disney, y me encantaba participar en un programa que unía a las familias y el baile. Yo soy superfamiliar, me encanta bailar... Así que lo tenía todo. Es un programa que puede aportar muchísimas cosas a los niños, como conocer a una gran diversidad de familias. Estoy feliz de presentarlo.

–Usted ya tenía un grupo de niña, Trastos. ¿Hubiera convencido a sus padres para participar en un programa así?

–No sé si se hubieran animado... Mi hermano seguro que sí. Me ha emocionado ver la entrega de los padres, que aunque no supieran bailar sabían que a sus hijos les hacía tanta ilusión participar que se apuntaban. Verles ensayar por los pasillos, con esa unión familiar y pasando ese ratito juntos, es una experiencia maravillosa que les va a quedar para siempre.

–En las coreografías hay mucho trabajo técnico, ¿qué más buscan?

–Es un programa de baile y, lógicamente, había que bailar bien... Pero no buscamos tanto la perfección o que sean supercorrectos, sino que tengan magia, ese talento, esa unidad familiar y, sobre todo, que lo disfruten. Tenemos familias que no han sido tan competitivas, sino que venían a pasar la experiencia y a disfrutarlo, y eso también es fundamental de inculcar a los niños: no todo es ganar en la vida.

–Usted es un claro ejemplo de que no siempre es tan importante ganar. Quedó sexta en OT 4...

–Por eso digo, mírame a mí. No importa tanto el premio de quedar el primero, sino lo que ganas con todo lo demás. Yo creo que al final se trata de tener una experiencia, de que todo vaya bien, de aprender, y no solamente le va bien al que gana. ¡Quién me iba a decir a mí que iba a seguir trabajando tanto y haciendo todo tipo de cosas! Es importante que a un niño no se le meta esa presión encima de que tenemos que ganar, y eso creo que todas las familias de “Fam Jam” lo han tenido muy presente. La educación que le se le da a los niños es fundamental.

–En este concurso, además, se quita la presión de juzgar que sí tiene en “Idol kids”.

–Aquí los jueces son los niños, deciden qué familia pasa y qué familia gana. Son los mejores jueces, porque siempre dicen la verdad.

–¿Hay que tener una sensibilidad especial para juzgar a los peques?

–Con toda la experiencia que llevo, siempre he intentado juzgar de una manera constructiva. Intentar ayudar y valorando de manera cariñosa. Creo que la mayoría de la gente agradece que se le digan en qué puntos pueden mejorar.

–Pasa el día rodeada de niños.

–Que cantan y bailan. Genial. Es maravilloso ver la generación que viene de talentos y artistas. Aquí no tengo que juzgar, pero en “Idol kids” sí y es un poquito más complicado. Pero creo que aceptan mucho mejor las críticas que muchos adultos. Les puedes decir cosas que pueden mejorar y los niños son como esponjas, enseguida se dan cuenta de que lo que les dices es verdad y no se lo toman a mal, incluso quieren mejorar, aprender en la vida. Lo hacen todo muy fácil.

–Este 2020 está siendo complicado para todos, pero para usted está siendo muy productivo, porque ha vuelto a sacar disco después de cinco años, “Catarsis”.

–Sí, está siendo especial, dentro de lo que cabe en un año tan raro y diferente para todos... El disco lo tenía previsto sacar en abril, aunque hubo que cambiarlo por el Covid. Profesionalmente, para mí está siendo un año muy completo, proyectos que te hacen evadirte un poco de todo esto que estamos viviendo. Se trata de seguir un poco dentro de la normalidad, entre comillas porque ahora nada es normal, para poder ir haciendo cosas e ir avanzando en la vida.

–Este disco le ha permitido también mostrar su faceta como compositora. Incluso le dedica una canción a su novio [el portero David de Gea], “Tal vez”.

–Es el primer disco en el que he tenido plena libertad para hacer de todo, para componer los temas, para la producción, para la imagen que queríamos hacer... Estar al cien por cien involucrada en un disco es algo que sí que había echado en falta en mis anteriores trabajos. Así que es un proyecto muy personal y quizá te diría que es mi disco más especial.