Un paseo de lo más romántico para el Día de San Valentín. El Rey Felipe y la Reina Letizia recorrieron los bosques, dunas y playas del parque nacional de Doñana en su primera visita a este espacio natural en su condición de Reyes. Tras asistir por la mañana en Almonte a la sesión inaugural del congreso que se celebra con motivo del 50.º aniversario de este parque, por la tarde quisieron respaldar la labor de protección del mismo visitando algunas de sus zonas más emblemáticas.

Los Reyes, montados en uno de los autobuses todoterreno que realizan las visitas guiadas al parque, han atravesado parte del mismo hasta el enclave conocido como Vera del Puntal, uno de los sitios frontera entre los ecosistemas de este espacio protegido.

Allí han observado con telescopios algunas especies de aves que se encontraban en zonas de marisma. Desde ese lugar, y transitando en parte por el camino que usan las hermandades para llegar a la aldea de El Rocío y venerar a la Virgen en su ermita, se han trasladado hasta el punto conocido como Cerro de los Ánsares, una zona de dunas a la que han subido a pie para observar también desde allí el paisaje y otros grupos de aves.

Han posado en diversos momentos para los informadores gráficos, que les han llegado a recordar que en esta jornada se celebra el día de San Valentín. A continuación, el vehículo en el que se han desplazado les ha llevado por las playas de Doñana hasta la de Malandar, situada frente a la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda. En esa playa han subido a uno de los barcos que cruzan el río Guadalquivir hasta la playa sanluqueña de Bajo de Guía para cerrar allí su visita presidiendo un acto con motivo de la conmemoración del V Centenario de la primera circunnavegación.

Para el paseo, doña Letizia lució un sencillo conjunto de camisa y pantalón. El conjunto fue una elección acertada para el entorno en el que se encontraban, luciendo un pantalón vaquero de talle alto y corte recto en color blanco a juego con una camisa en el mismo tono por dentro de los pantalones.

La Reina ha completado el look con unos botines color camel de tacón medio, un calzado que no estamos acostumbradas a verle con frecuencia, pero que ha queda de lujo con su look monocromático y son perfecto para caminar por la reserva de Doñana.

Los Reyes visitaron por la mañana la aldea de Almonte y se presentaron a la Virgen del Rocío, mostrando una gran complicidad en todo momento. Ambos derrocharon simpatía con la gente que les esperaba y se vio a la Reina Letizia cogiendo a un bebé y acunándolo. Eligió para esta ocasión un vestido de lunares vaporoso de cuello caja, corte midi con una falda muy sugerente tableada. El corte del vestido, a la cintura, es muy del estilo de ella. La manga abullonada tiene un pequeño volante en la manga. Vestido con aire, con volantes y cómo no de topos, aunque discretos, reiventando el estilo andaluz que corre por la feria. Este diseño está firmado por Armani.