El diseñador gallego Roberto Verino nació como Manuel Roberto Mariño Fernández en la capital de la comarca de Monterrei, Ourense, a la que debe su apellido artístico: Verín. Desfiló ya en 1984 en la entonces pasarela Cibeles y hoy (21.30 horas) exhibirá de nuevo su colección en la 70ª edición de Mercedes Benz Fashion Week Madrid (MBFW), en la Real Casa de Correos de Puerta del Sol.
-La continuidad de un trabajo creativo es como mantenerse en una maratón...
-Como mínimo. Mantenerse y, a ser posible, ser capaces de llegar al podio. Es el objetivo de cada una de nuestras puestas en escena. Es la búsqueda de la excelencia, por un sentimiento de perfeccionismo que llevamos en la sangre. Es una manera de ser.
-Me han adelantado su inspiración: la esencia minimalista de los 90s y el espíritu "sport" de los 70s .
-Hay varias razones. Para mí es muy importante tener un hilo conductor, una historia que contar. El 16 de julio será el veinte aniversario del desgraciado accidente que les segó la vida a Carolyn Bessette junto a su marido, John F. Kennedy Jr. Eran, sin duda ninguna, dos personas vinculadas con la moda: ella era una modelo de éxito y él un hombre con mucho poderío y proyección social. Esa circunstancia desgraciada nos permite recordarlos, porque así no se han muerto del todo y su vida sigue formando parte de la nuestra. Además se da la paradoja de que su desaparición coincidió con el momento cumbre de la marca Roberto Verino, que tuvo un enorme despegue tanto nivel nacional como internacional. Me pareció que era buen momento para recuperar esta historia, que también nos afecta nosotros. Y me fijé en aquella época de buscar la máxima funcionalidad.
-Una de las críticas constantes a la moda es por su consumismo salvaje.
-Llevamos años criticando ese despilfarro que no ayuda para nada a la sostenibilidad. Yo me he volcado siempre en encontrar materias primas de gran calidad, para que las prendas fueran capaces de vivir el mayor tiempo en los armarios de las personas. Lograr que realmente fuese una inversión no un malgasto 'hacerse' un armario. Además, cada una de las personas le da una 'vestibilidad' distinta a cada modelo. No es consumir más, sino consumir mejor. Es un objetivo que comparto desde hace tiempo y que sigo defendiendo. Me parece interesante que sigamos soñando con la Luna, pero con los pies en la Tierra. Aquellos maravillosos años 90 empezamos a ser reconocidos y hacer cosas de mucho mérito tanto a nivel de producto como de imagen, catálogo, modelos? Me preocupo de nunca perder el norte. Es la esencia que nos ha hecho ser lo que somos y quiero que esté ahí siempre, en personajes tan emblemáticos como Carolyn. Es como intentar que no se muera nunca lo que realmente nos ayuda a ser lo que somos.
-Abrió un camino Verino con la la 'sofisticada comodidad' de sus prendas. ¿Se considera un precursor en la moda de hombre de ese concepto, hoy tan actual?
-Sin duda ninguna. Yo creo que lo importante en la vida es tener una serie de valores, siempre actuales. La gente consume la modernidad como algo raro: se están semi disfrazando, buscando cosas que al final no le aportan nada, porque están insatisfechos con su capacidad de aceptarse. La moda tiene que ser un elemento de disfrute, no de penalización. Vale la pena apostar por la calidad, por la sencillez; vale la pena ser uno mismo, ser diferente, aportar valor cada día y que la imagen que transmites sea la que tú eres de verdad. Seguro que te genera también una capacidad de sentirte único.
-Pasando por lo tejidos que presenta: rústico y artesanal; denim y ante. ¿Qué veremos hoy?
-Las características de aquella época son muy notorias: la raya diplomática en los dibujos estaba muy presente, la napa y el ante también eran productos súper valorados, que nos han permitido que nos conozcan en el mundo. El denim en los 70 ha sido tendencia. Y sobre todo, los tejidos técnicos, que desde los años 90 hasta hoy en día nos acompañan. Los hemos hecho nuestros para el día día y de ahí que todas las inclemencias del tiempo se resuelvan con un "efecto cebolla": ir poniéndote capas por encima e ir quitándolas conforme cambia la meteorología. Los tejidos técnicos de muy buena calidad son la forma atemporal de hacerle frente a la climatología cada vez más cambiante.
-Su ropa se vende en hoy en día en unos veinte países.
-Estamos teniendo un desarrollo muy importante en América Latina. Estamos llegando a importantes acuerdos con empresas de Colombia, México, Chile, Perú... En España también estamos de alguna forma incorporándonos a todo el mundo de los accesorios y nuestro principal socio es El Corte Inglés, del mismo modo que lo es El Palacio de Hierro en México.
-¿Cómo les ha repercutido la avalancha de las ventas online ?
-No está reñida con la otra. Online se convierte en una manera de conocer lo que ofreces y de facilitar la compra a personas que no tienen una tienda cerca. Pero no es privativo: ambas van de la mano. Suman. Cada vez estamos más convencido de que son dos maneras muy importantes de dar servicio.
-¿No han tenido que cerrar tiendas ?
-No, al contrario. Las tiendas online ayudan a las otras y viceversa. Eso nos permite también que la imagen se transmita de forma inmediata a todo el mundo. Gracias a las nuevas tecnologías y al smartphone no tienes que estar la calle más importante de tu ciudad. Los retos que se nos avecinan son muy prometedores y emocionantes.
-Cite uno de esos retos.
-Estamos trabajando también por estar en el mercado ruso y en el de Oriente próximo. De algún modo, intentamos expandirnos por aquellos mercados en los que tenemos la capacidad de ir conociendo quién es nuestro target más interesante y así conseguir una estabilidad y garantías de futuro.
-Como ya hizo en otras ocasiones en esta pasarela, presenta una colección que ya pone a la venta inmediatamente.
-La ropa ya está en tiendas y de aquí al mes de septiembre esta colección se irá incorporando, poco a poco. No tiene vuelta atrás. Yo soy un defensor de esta teoría y creo que tarde o temprano, todos van a seguir esta línea, que es la que aporta más sentido común de cara a los consumidores.
-Compagina este oficio con el sector de la viticultura en la D.O. Monterrei. ¿Volverá en verano?
-Soy un gran defensor de mi tierra. Cuando todo el mundo viaja yo, que lo hago mucho el resto del año, paso en Monterrei mis días de vacaciones. A contracorriente.
